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martes, 8 de enero de 2013

Estreñimiento mental

La quiebra de Sanitarios Roca a causa de una multa de la Unión Europea de 38,5 millones de euros me llena de confusión y horror; ¿en quién podremos cagarnos ahora tranquilamente los españoles? Cierto que siempre tenemos Gobierno, Oposición, Judicatura y Papa de Roma, pero nosotros somos gente seria, que no caga en cualquier parte, ni mucho menos en estercoleros, corrales de gallinas y pozos ciegos de tal putrefacción. Como dice la coplilla manchega:


Una mierda en un camino
se tiene que respetar,
porque aquello representa
al hombre que fue a cagar.

Siempre hay gente inconsecuente, que ni siquiera hace una mierda consistente, sino pura diarrea. Y es que cagar no tiene precio, como sí lo tiene en Europa: en mis tiempos y en París, medio franco. Hasta había una respetable señora junto a la puerta del W. C. para llevar la contabilidad. Recuerdo los graffiti de mi no del todo perdida adolescencia/insolescencia, desde la rehecha cita de El cementerio marino de Paul Valéry:


La merde, la merde, toujours recommencée! 

A los clásicos: "En este lugar sagrado / donde entra tanta gente / hace fuerza el más cobarde / y se caga el más valiente" o "si la mierda valiera dinero, los pobres nacerían sin culo". Recuerdo también el notarial que, en el cine Pleyel, recoge Camilo José Cela en su San Camilo 1936: "Aquí cagó José Sacristán Gutiérrez el 12 de febrero de 1936", por no mencionar la otra retahíla: "Caga tranquilo, caga contento,  pero, hijoputa, cágate dentro. Cabrón el que lo lea, Más cabrón es el que lo escribió, Vivan las JSU, Caga el rey y caga el papa y en este mundo de mierda sin cagar nadie se escapa, Aquí se caga y aquí se mea y aquí el que tiene tiempo se la menea, No te cagues en la tapa maricón, Viva Falange Española. ¡Viva la República! No tirar de la cadena todo para el jefe etc...". Y es que eso de cagar es el colmo del egocentrismo mayestático: hacer lo que nadie haría en tu lugar. Decía Julio Iglesias en su autobiografía que se sentía raro cada vez que acudía al retrete, porque es bien sabido que los mitos no cagan. Y eso de no cagarse, para hacerlo todo después con harta dificultad, es un estreñimiento que en el caso de los políticos es mental. Los políticos, en vez de cabeza, tienen culo. Por eso solo se les ocurren mierdas y los llaman caraculos. ¿Darán la cara los que han dado el culo? Porque si lo dieran sus señorías, el panteón donde descansan las diversas esperanzas españolas, el Congreso de los Diputados, se quedaba vacío. Pero qué vamos a decir; esto de cagar es hasta cosmológico y existe por ahí la tremenda teoría de que el universo entero proviene de un agujero negro... No es cosa de risa: los planetas mayores de todos los sistemas solares, como lo son los del nuestro, son gaseosos, y la composición mayoritaria de su atmósfera es la misma que la del pedo: metano.  

domingo, 25 de diciembre de 2011

Una revolución norteamericana

Un fantasma recorre los Estados Unidos. Cargas policiales, decenas de heridos y cientos de detenidos... ¿Qué ocurre? ¿Son los Indignados, una revuelta racial, una protesta contra las pena de muerte, una manifestación contra la venta pública de armas?

No: Nike acaba de poner a la venta sus nuevos modelos de zapatillas.

Por si alguien no siente vergüenza de pertenecer a la grey humana.

miércoles, 8 de junio de 2011

Cerdomaquia o cerdopeya política.

Para mejor describir lo que hace un político español hay que recurrir también a palabras griegas: -maquia y -peya: lo de los políticos hispanos es una cerdomaquia y una cerdopeya. A veces ingeniosa, como cuando llaman a Crackman Eduardo Manostijeras. Y mientras en su guardería los políticos se tiran las mierdas con la mano, a ver quién queda más presentable, uno, que pide silencio y compostura en vano, los manda al rincón de pensar de la guardería o lee la regla periódica de elementos: la universidad española, la que más profesores tiene y menos investiga. Este río suena y lleva agua (turbia) desde el XIX; no, XVIII; no, XVII... Bueno, dejémoslo, pues nadie va a hacer nada, que es lo que se viene haciendo -o sea, nada- desde el siglo XVI lo menos. Siempre que se intentó hacer, alguien, por lo general relacionado con el poder absoluto, apretó el freno: al comienzo del XVI, a comienzos del XIX, después de la guerra civil en el XX. Otra: Rubalcalva dice es vergonzoso que el estado enseñe cuentas. ¿Sólo de eso siente vergüenza? ¿Es que son suyas? ¿Quiere le enseñe las mías? Se ve: sólo se siente vergüenza si te descubren honrado, palabrón que en Sólo ante el peligro era antítesis de listo. En fin, quizá Rubalcalva -como Crackman, por demás- no está solo, pues cocina con chorizos para hacer migas.

Cocinar sin chorizos es para gente hambrona y sin padrinos, sin bautizar, huérfana, que no hay quien cristiane, porque no tiene nada que dar, sólo hambre. Las gachas no son de arrope.

Por no tener, ni siquiera tiene bolsillos.


Ya se sabe: partiendo de la nada, hemos alcanzado las más altas cumbres de la mierda; porque los pobres ni siquiera tienen de eso, y hay hasta quien los haría nacer sin culo. Y nos entretenemos tirándonosla con la mano.

Lo malo es que, como dice Cela, estar en la cumbre es incómodo, porque se clava en el culo.

sábado, 28 de mayo de 2011

De pena

Nada ha cambiado desde el XIX. El hispanista inglés Richard Ford escribía que, al contrario que en los demás países de Europa, el pueblo español era muy superior a sus gobernantes. Hasta ahora la historia no lo ha desmentido. No tenemos los políticos que merecemos: no están maduros para asumir la misma democracia que dicen servir, y así se hacen elegir, tanto los unos como los otros que se dicen sus opuestos, por el mexicano procedimiento del dedazo (lo que los sociólogos, siempre más científicos ellos, llaman cooptación, y los periodistas clientelismo) en vez de ser elegidos, atribuyendo al pueblo la inmadurez que ellos ejemplifican. Esa democracia monárquica y senatorial que dicen haber implantado en España es en relaidad un prepostfranquismo, una falsedad cuyas semillas se han visto crecer en treinta años hasta que ahora dan copiosa fronda y fruto de mentiras. Esta constitución no nos vale. No quieren listas abiertas, permiten la corrupción, costean unos sindicatos que deberían financiarse por sí, lentifican y pervierten la judicatura, se dejan comprar por los banqueros, compran a su vez a los periodistas, perrean y dormitan en las universidades donde esclavizan a los becarios, degeneran la enseñanza, impiden que el Defensor del pueblo pueda realizar investigaciones, cargan en nuestros agujereados bolsillos el coste del pan y el circo, el de la corrupción y el de los tres gobiernos (llenos de políticos inútiles cooptados por ellos) endeudados hasta las cejas (estatal, autonómico y municipal), meten mano en las cajas de ahorros y a través de ellas en nuestros bolsillos (cajas vacías que ahora son montes sin piedad, o sea, bancos) y toleran que imputados y condenados hagan planes de latrocinio a largo plazo presentándose a elecciones sin listas abiertas y donde ya es imposible encontrar hombres como los de Plutarco, sino sólo como los de Suetonio. Como dicen por ahí, una generación tapón; de pena.

viernes, 6 de mayo de 2011

Aplicaciones de la Teoría de la relatividad a La ley del embudo



El Banco de España ve "excesiva" la subida de los sueldos de la gente común; pues la subida de sueldos a los banqueros, la verdad, yo (y no pocos más) no la vemos excesiva, sino desmesurada, absurda. ¿A quién le harán más caso, a los que son más e importan menos o a los que son menos e importan más? Ah... ¿No le llamaban a esto la ley del embudo?


No me extraña que los políticos, después de haber gobernado, terminen con esos sueldazos en los grandes consejos de administración de los bancos españoles, aunque no cobren bonus como sus patrones.

miércoles, 23 de marzo de 2011

Humo negro

Parece que la serie Lost o Perdidos no ha terminado todavía, al menos en este universo paralelo. En una isla remota del Pacífico ha surgido una columna de humo negro maléfico que nos tiene a todos acojonados. Algo se está quemando en el mundo, ya que es visible desde todos los puntos del globo, que, después de todo, también es una isla. Sale de un fogón nuclear donde unos desaprensivos japoneses intentaban cocer un plato de cerdo agridulce al plutonio, y no de la Cabaña de Jacob precisamente. Ni todos los esfuerzos de Locke, Sawyer y Jack han logrado aplacar al monstruo al que esos nipones han dado tanto fuelle: allí se están achicharrando vivos sin lograr achicar el fuego. Todo empezó con el terremoto que hizo la isla al moverse cuatro metros hacia el oeste. Entonces salió una humareda tal que sólo habría podido provenir de la garganta de Godzila.

Habrá que tener Karma con la iniciativa Dharma.

domingo, 20 de marzo de 2011

Miley Cirus y los factoides

Miley Cirus, más conocida por su papel (de calco) de Hannah Montana es, eso pregona su bio en Wikipedia, actriz, cantante, compositora, bailarina, autora, empresaria, diseñadora de moda y modelo. O sea, una donna universale del Renacimiento yanqui. Pero lo que es en realidad es negocio; "hay cosas que sólo son un nombre y una figura", diría Quevedo, pero la sociedad de consumo transforma ese nombre y figura en una marca o regalía; es un pedacito o pompa de información que vive de los factoides que genera y divulga el papel satinado o couché. Es guapa, pero no más que chorrocientas chicas de su pavososona y especta-culona edad, una rubita vulgosa resignada a ser una pajina en los anales de la ordinariez. Quizá es pizca más sensata y equilibrada que otros totems del divipijismo invariablente estultos, como las Superficial friends: Nicole Ritchie, Paris Hilton, Lindsay Lohan y las gemelas Olsen, que para mí todas ellas son gemelas clónicas de espíritu entre sí, e incluso de cuerpo: tetorrubias rectificadas con ayuda de botox, trapos y fajina, tanto monta. Ni hubiera más que pedir, si se quedaran en sus trece. Pero estas chicamonas (o chitamonas) nunca crecen.

viernes, 4 de marzo de 2011

Carnaval

Anuncian Carnaval. ¿No basta el de todo el año? ¡Cuánta careta sobre la carota! En Colombia, veinte hipopótamos del narcotraficante Escobar, abandonados, montan su propio carnaval pisoteando sembrados, asustando indios y comiéndose la cosecha de coca. Casi nada, veinte hipopótamos colocados bailando una guajira y en busca de novia. Pero aquí es peor. Uno necesita venas de aluminio y sangre de ácido molecular para poder tratar indignamente a la orgía de codiciosos, corruptos y chiflados que dice hay democracia en España y se viste piel de oveja con forro lobuno. Pero la culpa es nuestra, por elegir según un sistema que no eleva al mejor, sino al bandido más vendido para hacerlo prebendado. Algo debería poder la razón para que se impusiera sobre tanta estupidez e impotencia como aquejan a los pobres gobernadores de la Europa.

viernes, 25 de febrero de 2011

Es cultura y escultura

En general, en España interesa más el abdomen que la cultura. O la contemplación, que no consumición, de la tableta de chocolate, que es lo mismo. Hay que bajar de peso a la cultura para que en el abdomen asomen las onzas. Eso se cumple en C. Ronaldo, cuyo trabajo principal es dar patadas. El mundo para él es redondo, pero sólo porque se parece a una pelota. Todo el mundo le quiere ver con pelotas, y hasta en pelotas. Pelotudo, que dicen allá. Cuando no había fútbol, el vulgo masculino tenía su eje cultural en los toros; el femenino ha pasado de tenerlo en las fotonovelas y culebrones a tenerlo en el Hola.


La CE, el FMI y el BCE siguen en su linea de reducir a la población europea a la servidumbre en pro de una elite aristocrática, religiosa, financiera y política, banda de piratas que nos llama piratas a nosotros, mientras el valor del trabajo se deprecia y merma la capacidad económica del que lo produce. Pero la inoperancia de quienes deben regir estas materias sigue sin ser sancionada y esa gentuza deshumanizada cree que puede seguir en tal deriva sin que le atemorice la posibilidad de una revuelta social como las norteafricanas (que no son por la libertad ni por la democracia ni otras vaguedades, sino por el precio del pan y del agua)

La ortorexia hace estragos. Espanto da que las parejas de veganos tengan hijos minusválidos a causa de su dieta ultravegetariana. Son manifestaciones de ese pensamiento mágico, cultivado de forma desasosegante por la publicidad y el hiperconsumo. Porque todas las dietas son mágicas y todo lo que dice alguien, si es alguien y está bien vestido y vendido y publicitado y perfumado, es verdad sacramental. Cuán gritan esos malditos.

viernes, 18 de febrero de 2011

Ruiz Mateos y Shoemaker, ejemplos de los males del optimismo

José María Ruiz Mateos y un tal Shoemaker son ejemplos vivos de los males derivados del optimismo injustificado. Porque el justificado es positivo para la sociedad, como compás o vaivén que permite salir del negro agujero pesimista y llevar a un lugar más alto. Porque el optimismo injustificado no es más que pesimismo disfrazado. La abejita debía saber que no hay más cera que la que arde, ni más riqueza que la que uno puede amasar consigo mismo honradamente. Los ilusos hacen mucho daño, porque la luz de la llama los deslumbra y ciega, de forma que conducen a otros ciegos al abismo. Igualmente, la abejita del político mentiroso debía saber que el frondoso árbol de la mentira termina desplomándose sobre su dueño, cuando la verdad le come las raíces, como enseña el Libro de Patronio (don Juan Manuel).

No pretendo extraer conclusión alguna. Cada cual tiene sus propios combates y luchas en este escenario que es el mundo. Es el valor moral de la responsabilidad lo que convierte a la pieza en una tragedia, poque los palos (del sombrajo) caen siempre sobre los mismos. Que no son ni el primero ni el segundo de los divos o papeles principales, sino los últimos actores, la comparsa. A los espectadores nos da igual: es una obra que hemos visto repuesta ya demasiadas veces.

miércoles, 2 de febrero de 2011

Cinco millones de parados

Hace dos años escribía que Shoemaker no debía desanimarse con haber conseguido cuatro millones de parados y que, con un poco más de esfuerzo, podría llegar a los cinco perfectamente. Algún amigo entonces me dijo que sería imposible, que era una broma... Pues no. Ya se está viendo, y ya se verá más aún a fin de año, cuando nos tengamos que comer la mala uva. Que le den... una medalla a ese señor, nuestro propio Mubárak por lo que tarda en irse a gobernar a Namibia. Y no es que esté criticando a los políticos; nosotros mismos, clase media española, somos la causa de tanto paro y tanta crisis en nuestro país, suponiendo que sea nuestro, lo cual es bastante dudosillo, ya que lo gobierna Ángela Mérkel. Y la causa la somos

1. Por nuestro desdén hacia el que trabaja y se esfuerza, al mérito y a la capacidad.
2. Por nuestro desprecio y falta de apoyo al que se interesa por el progreso y el bien colectivo, no el individual.
3.Por nuestra propia falta de fe y confianza en el entusiasmo emprendedor de los niños y los jóvenes, esos ninguneados.
4. Por nuestra falta de voluntad para acabar (y perfeccionar) lo que empezamos, la abulia, como dictaminó Ganivet.
5. Por nuestra nunca bien poderada y señalada cicatería y avaricia.
6. Por nuestra falta de coraje para asumir nuestro cochino y glorioso pasado y re-unirnos.
7. Por nuestra mediocridad, en fin.

Por cierto que avergüenza oír los telediarios del primer canal. No se puede manipular más la información; sólo hay medias verdades cuando se trata cualquier noticia mala sobre el gobierno; en el fondo todo se reduce a "Shoemaker en el país de las maravillas". No hay anestésico ni poción mejor preparada. Da grima.

Shoemaker

Dijo Fidel que la historia lo absolvería; se ve que él se consideraba a sí mismo historia y condenaba al pueblo a ser sólo una comparsa en la prisión de que es juez y alcaide y preso indultado; Mubarak, otro tío que se considera imprescindible, es ya un progreso: lo único que ha dicho es que la historia lo juzgará, sin meterse a profetizar cuál será la sentencia, esto es, sin ser juez y parte; se ve que tiene más de gallego que Fidel; es como Franco, este sí verdaderamente galaico (si te cruzas con él en una escalera no sabes si sube o baja), que nunca se metió en política; se da cuenta de que la historia lo está juzgando ahora y quiere dejarlo para mañana, como si el pueblo egipcio fuera el francés Sans-Delai de Larra; es una mera diferencia de tiempo verbal que se entiende al saber que procede de una larga tradición de momias más que de una tradición inmemorial. O de una colección de muertos como la del Panteón del Escorial, tan cantado por los poetas. ¿Y Shoemaker? ¡Bah! Lo mismo que Cleavage.

viernes, 30 de abril de 2010

La RAE

O Royal Cacademia de Legrain; los últimos y pudendos diccionarios de este pretencioso mal gálico son vivamente peyorativos e imprecisos, lo peor que se le puede achacar a un diccionario. La llamaría casposa, si la acepción de esta palabra en uso estuviese en su calvo y cretino Diccionario, pese a lo cual me he resignado a enviarles un mensaje, post, imail, emilio o correo electrónico, o, cual dirían ellos, encaramados a la cima de una peana, electrograma, con la sugerencia. Todo sea dicho, lava más blanco Ariel, aunque le quitaran el paquete de negociete que tiene al irse de públicas (tantas).

martes, 27 de abril de 2010

Una nueva causa paa el calentamiento global


Que el mundo actual, debido a nuestra obstinación en empeorar las cosas, se está volviendo cada vez más parecido al Infierno.

Paro y enseñanza

Por error se han dejado ver unos datos del INE y resula que ya rondamos el 20% de paro, 4.637.000 seres humanos; yo creo que el gobierno no debe desanimarse, que progresa adecuadamente y, si se esfuerza un poco, todavía puede llegar a los 5.000.000 del aprobado, aunque, en unas elecciones, lo más probable es que fuese suspendido. No tienen razón quienes dicen que los objetivos mínimos para aprobar en España son tan mínimos, que ni siquiera son objetivos y que en la vida real son más duros que en la enseñanza, qué va: a los tiernos gobiernos hay que tratarlos con blandura, pobrecitos. Véase por ejemplo a Grecia, que ha sufrido acoso escolar por parte de esa bruta de Alemania, y ahora, gracias a una adecuada intervención escolar del equipo psicopedagógico, ya puede superar el notable.

jueves, 22 de abril de 2010

Extraño caso es este

—Extraño caso es este —dijo Sancho— destos negociantes. ¿Es posible que sean tan necios, que no echen de ver que en crisis como estas no se ha de venir a negociar? ¿Por ventura los que gobernamos, los que somos jueces, como don Baltasar Garzón, no somos hombres de carne y de hueso, sino que quieren que seamos hechos de piedra mármol? Por Dios y en mi conciencia que, si me dura el gobierno, que no durará, según se me trasluce, que yo ponga en pretina a más de un negociante. Agora decid a ese buen hombre que entre, pero adviértase primero no sea alguno de los espías o matador mío y hágase luz, que está oscuro.

—No, señor —respondió el paje—, porque parece una alma de cántaro y, yo sé poco o él es tan bueno como el buen pan; y lo amerita ser natural de La Manchurria, como su excelencia el gobernador. Y luego muy presto traeré palmatoria y haré luz, que no falta aceite, aunque se cobre a real el cuartillo.

—No hay que temer —dijo el mayordomo—, que aquí estamos todos.

—¿Sería posible —dijo Sancho—, maestresala, que agora que no está aquí el doctor Ferrán Adrián, que comiese yo alguna cosa de peso y de sustancia, aunque fuese un pedazo de pan y una cebolla?

—Esta noche a la cena se satisfará la falta de la comida y quedará vuestra señoría satisfecho y pagado —dijo el maestresala.

—Dios lo haga —respondió Sancho.

Y en esto entró el constructor, que era de muy buena presencia, y de mil leguas se le echaba de ver que era bueno y gordo y lucio y muy buena alma. Lo primero que dijo fue:

—¿Quién es aquí el señor gobernador?

—¿Quién ha de ser —respondió el secretario—, sino el que está sentado en la silla, que no por no ser arzobispal, como la de su eminencia el de Toledo, que Dios guarde, es menos importante?

—Humíllome, pues, a su presencia —dijo el constructor.

Y, poniéndose de rodillas, le pidió la mano para besársela. Negósela Sancho y mandó que se levantase y dijese lo que quisiese. Hízolo así el constructor y luego dijo:

—Yo, señor, soy constructor, natural de La Manchurria, un lugar que está a una hora de AVE, muy cerca de Madrid.

—¡Otro Ferrán Adriano tenemos! —dijo Sancho—. Decid, hermano, que lo que yo os sé decir es que sé muy bien a La Manchurria, y que no está muy lejos de mi pueblo.

—Es, pues, el caso, señor —prosiguió el constructor—, que yo, por la misericordia de Dios, soy casado en paz y en haz de la santa Iglesia Católica Toledana, y aun en la Basílica Vaticana de la Torre Gorda, donde el cielo azul lloró una lágrima, como dicen los librotes del Taja-Majal; tengo dos hijos en la misma cofradía en la que el señor gobernador es gran hermano o hermano mayor, que el menor estudia para parado o quier que detenido, y el mayor para político; soy viudo, porque se murió mi mujer, o, por mejor decir, me la mató un mal médico, que se formó con la ESO y la purgó estando preñada, que si Dios fuera servido que saliera a luz el parto y fuera hijo, yo le pusiera a estudiar en un privado para cofrade, porque no tuviera invidia a sus hermanos el parado o detenido y el político, pero sí más suerte que ellos.

—¿De modo —dijo Sancho— que si vuestra mujer no se hubiera muerto, o la hubieran muerto, vos no fuérades agora viudo?

—No, señor, en ninguna manera —respondió el constructor.

—¡Medrados estamos —replicó Sancho— que razones como estas se las he oído a mi Sanchica, después de haber estudiado la ESO! Adelante, hermano, que es hora de dormir más que de negociar.

—Digo, pues —dijo el constructor—, que este mi hijo que ha de ser político quiso emprender un negocio de vuelos y otros excesos y compró unos majuelos para hacer una pista de aterrizaje, tras conquistar a trancas y barrancas los permisos de la Inquisición, que en eso de volar y otros excesos no las tenía todas consigo, y cerró negocios con la compañía voladora Clavileño, así como con unos moriscos que querían importar hierbas africanas y unos hidalgos manchurrianos, que habían estado con don Diego de Almagro y Cristóbal de Mena allá en el Pirú y querían llevarse aquí más hierbas, sobre todo unas aromáticas que son muy buenas para el espíritu y curan la melancolía de modo, que no hay más que ver y el señor don Quejoso quedaría muy contento y ya no pensaría más en Chuchinea. Y de este agio nosotros, que somos agiotistas, estaríamos muy felices y venturosos. 

–No los comería yo con más dientes, pero vive Dios, a fe mía, –replicó Sancho– que no es poco osado vuestro hijo, y peregrinas y nunca vistas las empresas que ha osado acometer.

–Pues aún más se aventuró mi bendito, porque quiso traer a estos lares y andurriales manchurrianos a mucha gente de Murcia, jugadora del dos, y montar una casa de leones o de juego, de cuyo beneficio se diese mucho barato a comerciantes y ricoshombres de nuestra tierra, mirusté, y así recaudar por mis pecados más oro, perlas y esmeraldas que la Garduña de Sevilla; es más, como que, animado yo por su misma venturosa visión, levanté chozos-casas en Valtimado, que ni el señor Enron ni los hermanos Lemandrines de que hablan los libros de caballerías las tuvieron mejores ni más ricas ni mejor acondicionadas. Y perdóneme el señor gobernador si por tan menudo voy pintando las partes de lo que cuento, que al fin al fin es mi hijo, lo quiero bien y no me parece mal.

—Pintad lo que quisiéredes —dijo Sancho—, que yo me voy recreando en la pintura y, si hubiera comido, siquiera unas gachas, no hubiera mejor postre para mí que vuestro retrato.

—Eso tengo yo por servir —respondió el labrador—, pero tiempo vendrá en que seamos, si ahora no semos. Y digo, señor, que fuera cosa de admiración, pero no puede ser, a causa de que está agobiado y encogido y tiene deudas para dar y tomar, y la crisis le ha topado tan de recio, que ni todas las rentas y arcas del Arzobispo de Toledo podrían llenar sus vacías faltriqueras y gatos.

—Está bien —dijo Sancho—, y haced cuenta, hermano, que ya la habéis pintado vuestro asunto de los pies a la cabeza y me maúlla a mí bien otro gato. ¿Qué es lo que queréis ahora? Y venid al punto sin rodeos ni callejuelas, ni retazos ni añadiduras.

—Querría, señor —respondió el constructor—, que vuestra merced me hiciese merced de darme una carta de crédito para que nos diesen más dineros, suplicándole sea servido de que esta componenda se haga, pues somos desiguales en los bienes de fortuna y en los de la naturaleza, y es menester el dinero del pobre para que el rico lo siga siendo y no seamos pobres todos. Porque, para decir la verdad, señor gobernador, mi hijo es endemoniado por la codicia, y no hay día que tres o cuatro veces no le atormenten los malignos espíritus, y de haber caído una vez en el fuego tiene el rostro arrugado como pergamino y los ojos algo llorosos y manantiales; pero tiene una condición de un ángel, y si no es que se aporrea y dase de puñadas él mesmo a sí mesmo cuando juega al pelotamano y zurrase a escritores públicos y periodistas y gente de tan mal pelo, fuera un bendito.

—¿Queréis otra cosa, buen hombre? —replicó Sancho, no muy desabrido.

—Otra cosa querría —dijo el constructor—, sino que no me atrevo a decirlo; pero vaya, que, en fin, no se me ha de podrir en el pecho, pegue o no pegue. Digo, señor, que querría que vuesa merced me diese trecientos o seiscientos ducados para ayuda de costa de mi político; digo, para ayuda de poner su casa, porque, en fin, han de vivir por sí, sin estar sujetos a las impertinencias de hipotecarios malvados y tener casa barata y acomodada para sí y sus parientes y cofrades y deudos y amigos, en el parajote llamado el Quesito o en Madrid, que de ahí márchase al cielo, sin necesidad de vuelo con la compañía Clavileño.

—Mirad si queréis otra cosa —dijo Sancho— y no la dejéis de decir por empacho ni por vergüenza.

—No, por cierto —respondió el constructor.

Y apenas dijo esto, cuando levantándose en pie el gobernador, asió de la silla en que estaba sentado y dijo:

—¡Voto a tal, don patán rústico y malmirado, que si no os apartáis y ascondéis luego de mi presencia, que con esta silla os rompa y abra la cabeza! Hideputa bellaco, pintor del mesmo demonio, ¿y a estas horas te vienes a pedirme seiscientos ducados? ¿Y dónde los tengo yo, hediondo? ¿En la Caja de Castilla Sin Blanca? ¿Y por qué te los había de dar aunque los tuviera, socarrón y mentecato? ¿Y qué se me da a mí de La Manchurria ni de toda la Cofradía de Mangantes, Cabezudos y Caballeros Mamandantes? ¡Va de mí, digo; si no, por vida del duque mi señor que haga lo que tengo dicho! Tú no debes de ser de La Manchurria, sino algún socarrón que para tentarme te ha enviado aquí el Infierno. Dime, desalmado, aún no ha día y medio que tengo el gobierno, ¿y ya quieres que tenga seiscientos ducados?

Hízole señas el maestresala al constructor que se saliese de la sala, el cual lo hizo cabizbajo y al parecer temeroso de que el gobernador no ejecutase su cólera, que el bellacón supo hacer muy bien su oficio. Pero dejemos con su cólera a Sancho, y ándese la paz en el corro, y volvamos a don Quejoso, que le dejamos vendado el rostro y curado de las gatescas heridas, de las cuales no sanó en ocho días, en uno de los cuales le sucedió lo que Cide Hamete promete de contar con la puntualidad y verdad que suele contar las cosas desta prolija historia, por mínimas que sean.

martes, 20 de abril de 2010

Rabbitlandia

Desde luego a mi subsconsciente le pasan cosas rarísimas, como al Atlético de Madrid. Pues no va y le da por soñar esta noche que, como nadie quiere ser español en España, a los conejos les da por reivindicar la propiedad del país, ya que su nombre significa eso, "tierra de conejos", y eligen presidente a Bugs Bunny y en la oposición quedó el apresurado conejo blanco de Alicia. Como el resto de los españoles empieza a pasar envidia al ver al país lleno de conejitas de Playboy, empiezan a decir que España es marca registrada desde más o menos 1492, a lo que Bugs alega que lo es desde hace 4000 años, cuando se empezó a usar entre los fenicios la denominación Hispania y que España designa una unión dinástica, no un país; los españoles alegaron que ellos no se refieren a la denominación en latín, que es un xenismo de origen fenicio, sino a la de España, que es muy posterior; los catalanes y vascos aprovecharon para meter baza, entró en Juego la Sociedad General de Autores de España y así se armó la que se armó, de forma que todo terminó en una pepitoria de conejo / cacería / guerra civil que no veas, donde incluso se recurrió a la mixomatosis como guerra bacteriológica, y aquí me desperté.

domingo, 14 de marzo de 2010

Molotov


Con unos políticos como los que tenemos, el único programa a seguir no puede ser otro que el Da da da de Molotov, no el de Zam; y así con todos los que quieran darle a la sociedad forma de pirámide y no de meseta. Sí, sí, sí...

lunes, 1 de febrero de 2010

Pensamientos literarios de una alumna de ESO

Tomado de por ahí:

Garcilaso enamorado de Isabel Preysler, Bernardo del Caprio, el cantar de gesta del Cid Campoamor...

Bendita reforma educativa.

martes, 26 de enero de 2010

Qué remedio

Esta mañana un profesor se quejaba a sus hijas:

-No quiero ir al cole.

Sus hijas le miraban consternadas; no, no estaba enfermo, no sufría baja de ningún tipo; sencillamente, su padre era así de infantil, de convoluto y de cebollo; sin embargo, como ellas son muy conscientes -salieron a su madre- le tiran de la cama, le arrastran hasta el desayuno y le preguntan ¿por qué?...

-Me aburro mucho, los niños son muy malos, me pegan y me insultan; me canso mucho, no entiendo nada de lo que hacen y de lo que dicen y me dan un montón de exámenes para corregir, cuando yo lo que quiero es jugar al fútbol y hacer dibujos.

El profesor escucha las sensatas y maduras reflexiones de las mocosas sobre el deber bien cumplido, lo de ser un padre de provecho y todas esas monsergas de que los profesores han de dar ejemplo e instruir al que no sabe, etcétera. El profesor no está muy convencido, pero al final la ley dice que tiene que ir al cole.

Todo sea por los niños.