Mostrando entradas con la etiqueta Pensiones. Mostrar todas las entradas
Mostrando entradas con la etiqueta Pensiones. Mostrar todas las entradas

martes, 31 de diciembre de 2024

Los clientes de planes de pensiones podrán retirar de golpe 64.000 millones desde el miércoles

 Miguel Moreno Mendieta, "Los clientes de planes de pensiones podrán retirar de golpe 64.000 millones desde el miércoles", en Cinco Días, 31 de diciembre de 2024:

Los bancos temen una salida masiva de dinero, pues la normativa permite retirar los fondos aportados antes de enero de 2015 y que suponen más de la mitad del total

Los planes de pensiones afrontan una prueba de fuego a partir del 1 de enero de 2025. Por primera vez desde que se creó la figura hace 38 años, sus dueños podrán retirar de golpe el dinero que tienen acumulado. Tan solo con una condición, que las aportaciones tengan una antigüedad de más de 10 años. Esto se traduce en que, desde el miércoles, estarán totalmente disponibles 64.000 millones de euros para rescatar del plan a la cuenta corriente. Es justo la mitad de todo el patrimonio que hay acumulado en estos vehículos de ahorro para la jubilación.

Este pequeño cambio legal puede ser muy importante para algunas personas. Es el caso de Pilar, una profesora interina que atraviesa una situación económica complicada. “Tengo varias deudas que me hacen llegar muy justa a fin de mes, pero dentro de unos días voy a poder rescatar una buena cantidad de dinero que había metido hace años en un plan de pensiones, y que me permitirá cancelar varios créditos. Para mí va a ser un alivio”, explica.

Fue Mariano Rajoy quien impulsó un real decreto en 2018 que modificó uno de los aspectos esenciales de este tipo de producto financiero, para mejorar su liquidez y hacer más atractivas las aportaciones. La concepción original de los planes de pensiones los configura como una vía de ahorro para acumular recursos que permitan completar la pensión pública: la persona va metiendo dinero poco a poco y, hasta ahora, no podía rescatarlo si no alcanzaba la edad legal de jubilación. Para que este proceso de ahorro fuera llevadero, el importe que se va añadiendo al plan se descuenta de la base imponible del impuesto de la Renta. Si alguien ganaba 35.000 euros al año y aportaba a su plan 3.000 euros, solo paga IRPF por 32.000 euros. A cambio, al llegar a los 65 años y empezar a rescatar el plan de pensiones, ese dinero tributa como una renta del trabajo, igual que un salario. Así que, a fin de cuentas, se trata de un diferimiento fiscal.

Ahora, toda de esta concepción del plan como previsión social complementaria va a cambiar. Cualquier partícipe puede acudir a su banco y reclamar el reembolso de aquellas aportaciones anteriores al 1 de enero de 2015, junto con los rendimientos que estas hubieran generado. De acuerdo con cálculos sectoriales, este importe supera los 64.000 millones de euros, lo que supone un 51% de todo el dinero acumulado en planes.

En puridad, este no es el primer supuesto de liquidez excepcional, pero sí el más extendido —afecta a todos los dueños de planes— y el más diferencial. De hecho, en los últimos años, los sucesivos Gobiernos han permitido retirar el dinero de los planes en caso de situaciones especiales: enfermedad grave, desempleo de larga duración, riesgo de desahucio, enfermos de covid-19 o damnificados por el volcán de La Palma y la dana de Valencia. Estas excepciones han hecho que cada ejercicio salgan entre 150 y 300 millones de euros de los planes. Un flujo pequeño comparado con el gran caudal que podría abrirse ahora con el supuesto especial de los 10 años de antigüedad.

Inquietud sectorial

En los bancos, que controlan mayoritariamente el sector de los planes de pensiones, hay una cierta inquietud porque a partir de enero pudiera registrarse una retirada masiva del dinero depositado en este producto. Durante mucho tiempo, la asociación de las gestoras de fondos de inversión y planes de pensiones (Inverco) ha reclamado que se revisara este supuesto especial de liquidez “porque desvirtúa la figura del plan de pensiones”, pero ha acabado dándose por vencida y defendiendo que el impacto será pequeño. Cuando la medida se aprobó, se pensaba que al tener una ventana fija de liquidez a los 10 años la figura se haría más atractiva, porque el dinero no tendría que estar indisponible durante tanto tiempo. Pero la figura no ha acabado de despegar.

Desde el sector se mira ahora el equivalente a los planes que existe en el País Vasco —las denominadas Entidades de Previsión Social Voluntaria, EPSV— en las que ese supuesto de rescate con 10 años de antigüedad está vigente desde 2016. En este caso, las retiradas por este motivo han sido testimoniales. Sin embargo, en una figura similar de Reino Unido, la incorporación de esta ventana especial de liquidez sí que produjo la salida de mucho patrimonio.

Uno de los frenos que tendrá el rescate total del dinero de planes es el fiscal. El dinero proveniente de la venta de la participación en un plan de pensiones computa como renta del trabajo en el IRPF y se le aplica el tipo marginal. Así, a un empleado con un sueldo de más de 60.000 euros que rescate su plan, tendrá que pagar impuestos con un tipo marginal del 37%, el vigente para su tramo de renta. De este modo, si sacara de golpe 50.000 euros, 18.500 serían para Hacienda. Paula Satrústegui, socia de asesoramiento patrimonial de Abante, explica que “a no ser que sea estrictamente necesario o fiscalmente eficiente por no tener otras rentas, el dinero aportado a planes de pensiones no debería de ser rescatado antes de la jubilación”. En todo caso, el impacto fiscal de rescatar de golpe el plan de pensiones ocurre igualmente si se espera a la jubilación.

Lo peor de la llegada de este nuevo supuesto de liquidez es que llega en un momento muy difícil para los planes de pensiones. El intento del Gobierno de fomentar los planes empresariales en detrimento de los individuales le llevó a fijar una aportación máxima en los primeros de solo 1.500 euros al año. Eso ha hecho que hayan dejado de entrar mucho dinero a esta figura. De hecho, entre enero de 2021 y septiembre de 2024 han salido 3.100 millones de euros más de los que han entrado. Si el patrimonio total, que ahora asciende a 126.000 millones de euros, ha continuado creciendo es exclusivamente por la revalorización de las inversiones ya realizadas en los planes.


Los españoles dan la espalda a los fondos de inversión sostenible por primera vez en 10 años

Madrid, el nuevo Miami de la banca privada: las entidades se vuelcan con los ricos latinoamericanos


miércoles, 16 de agosto de 2017

El deterioro de las pensiones

I

Daniel Viaña, "Según estimaciones de la AIReF. La subida de las pensiones en España, inviable salvo que el PIB crezca a ritmo récord," El Mundo, 16-VIII-2017:

¿Cómo se revalorizan las pensiones y por qué están perdiendo poder adquisitivo?


Las pensiones sólo podrían revalorizarse por encima del mínimo marcado por ley, esto es, más de un 0,25%, si la economía española registrase el mayor crecimiento promedio de su historia. Para ello, el Producto Interior Bruto de España tendría avanzar a un ritmo anual medio de casi el 4%, algo que sólo ocurrió entre 1998 y 2007 cuando el país llegó a experimentar crecimientos puntuales de, incluso, el 5%.Esto es lo que pone de manifiesto la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal española (AIReF), que ha elaborado un simulador en el que se observa que si en los próximos años la economía avanza siempre un 3,9% -que es exactamente el crecimiento promedio más alto de la historia-, las pensiones comenzarían a subir ligeramente a partir de 2020, para aumentar ya con algo más de fuerza en 2021 (un 1,5%) y en 2022 (un 2,4%). Sólo así podrían mantener mínimamente su poder adquisitivo, ya que en todos los supuestos se ha partido de que el Banco Central Europeo (BCE) será capaz de mantener la inflación en niveles cercanos al 2%. En cambio, en un escenario algo más moderado pero sensiblemente más optimista que el actual y en el que la economía creciese a ritmos del 3%, las pensiones sólo podrían crecer un 0,77% en 2022. En el resto de ejercicios se quedaría en el 0,25% mínimo y, por lo tanto, la pérdida de poder adquisitivo sería importante. Pero la realidad, o al menos la proyección que realiza la AIReF, es todavía más negativa. El organismo presidido por José Luis Escrivá estima que la economía crecerá un 2,7% en 2018 e irá perdiendo fuerza de manera progresiva hasta quedarse en el 1,6% en 2022. Las expectativas, si se tiene en cuenta el contexto europeo y los ritmos previstos para el resto de potencias, son bastante positivas ya que estas cifras permitirían que España siguiese liderando el crecimiento de la Eurozona y de la UE. Pero la satisfactoria posición no será suficiente para evitar que las pensiones se queden congeladas en el 0,25%. Y es más, si no hay reformas y si no se decide eliminar gastos o aumentar ingresos en el sistema, tal y como siempre subraya el propio Escrivá, esta situación de revalorizaciones mínimas se mantendrá por muchos años más. De hecho, la gravedad es tal que sin el Índice de Revalorización de las Pensiones (IRP), que es el que determina que la subida mínima anual debe ser del 0,25%, las prestaciones incluso sufrirían caídas. Según las estimaciones de BBVA Research, si se atendiese únicamente al estado de la Seguridad Social la cuantía de las pensiones debería haberse reducido en un 3% durante el presente ejercicio. Esto se debe a que los ingresos siguen sin ser suficientes para cubrir los gastos, y así seguirá siendo durante los próximos ejercicios. «En el periodo 2017-2022 los ingresos crecen un 4%, superior al 2,7% del crecimiento de los gastos, pero dicho diferencial positivo a favor de los ingresos resulta insuficiente para compensar el diferencial negativo acumulado durante los años de crisis, por lo que el IRP de 2017 es del 0,25%», explicaba la AIReF sobre este respecto hace menos de un mes. Decisiones del Pacto de ToledoEn este complejo contexto, se antoja fundamental que el Pacto de Toledo avance en las reformas que se deben llevar a cabo en el sistema de la Seguridad Social. Así deja entrever cada vez que tiene oportunidad la Autoridad Fiscal cuando apunta el mencionado «si no hay reformas», y así lo han puesto también de manifiesto los diferentes partidos sabedores de la importancia política que tiene las pensiones. La comisión que preside Celia Villalobos, por su parte, todavía no ha transmitido ninguna postura oficial pero sí que se han apuntado algunas opciones. Por un lado está la posibilidad de que las pensiones de viudedad y orfandad dejen de depender de la Seguridad Social y se incluyan en los Presupuestos Generales del Estado (PGE). Esto permitiría un alivio que algunos cálculos estiman en hasta 20.000 millones y que solventaría la mayor parte de las necesidades del sistema, pero generaría otro problema: habría que incrementar la recaudación tributaria para alcanzar esa cifra, algo que probablemente provocaría la creación de un nuevo impuesto. Otras voces apuntan a que el sistema no debería cargar con los costes de personal y funcionamiento de la Seguridad Social. Esto, apuntan los defensores de esta posibilidad, es lógico ya que la caja de las pensiones debe pagar eso, las pensiones, y no las nóminas de los trabajadores. Sin embargo, de tomarse esta decisión, el ahorro sería de menos de 4.000 millones, cantidad con la que seguirían siendo necesarias más actuaciones.

II

Isabel Munera, ¿Cómo se revalorizan las pensiones y por qué están perdiendo poder adquisitivo? El Mundo, 15 AGO. 2017:

Los sindicatos y la oposición presentaron una proposición de ley para que las pensiones subieran a partir del 1 de enero un 1,2% y evitar así que perdieran poder adquisitivo. El Gobierno la bloqueó y en 2017 han subido el mínimo: el 0,25%.

¿Cómo se calcula el incremento anual?

Hasta la reforma de las pensiones que aprobó el Gobierno del PP en 2013, se revalorizaban según el IPC. A partir del 1 de enero de 2014, sin embargo, se tiene en cuenta el llamado factor de revalorización.

¿Qué es el factor de revalorización anual?

Se trata un indicador que se calcula a través de una fórmula matemática y que determina la capacidad del sistema para actualizar las pensiones. Para calcularlo se tienen en cuenta diversas variables como el crecimiento de los ingresos, el número de pensiones, el efecto sustitución entre los beneficiarios que entran y los que salen, así como la diferencia entre ingresos y gastos.

¿Cómo se evita que las pensiones bajen en épocas de crisis?

Para evitar esto, se fijó un suelo mínimo de incremento de las pensiones del 0,25% anual y un máximo del IPC del año anterior más el 0,5%.

¿Por qué las pensiones se han revalorizado este año el mínimo si la economía crece con fuerza?

Porque la Seguridad Social presentaba a cierre de 2016 un agujero de 18.000 millones de euros. Además, mientras el sistema siga estando en una situación de déficit y no lo logre el equilibrio, se seguirá aplicando este índice mínimo.

¿Están perdiendo las pensiones poder adquisitivo?

Eso es, precisamente, lo que denuncian los sindicatos y la oposición. Hasta ahora no había ocurrido por el bajo nivel de los precios. Sin embargo, en 2016 la inflación cerró en el 1,6%, por lo que al ser superior este valor a la revalorización de las pensiones, éstas pierden poder adquisitivo.

¿Cuánto poder adquisitivo perderán?

Según un informe de CCOO, los pensionistas podrían acumular en 10 años una pérdida de poder adquisitivo de alrededor del 15% sólo por la aplicación del Índice de Revalorización de las Pensiones, y podría llegar a duplicarse si en 2019 entrara en vigor el llamado factor de sostenibilidad.

¿Qué es el factor de sostenibilidad ?

A partir de 2019 para calcular la cuantía de las nuevas pensiones se tendrá en cuenta también la esperanza de vida en el momento de la jubilación. Según un informe que encargó Empleo, las nuevas prestaciones podrían recortarse un 5% nominal cada 10 años por el efecto de este factor. Esta fórmula se aplica ya, con matices, en países de nuestro entorno como Portugal, Grecia, Alemania o Austria.