lunes, 4 de septiembre de 2023

Las 5 leyes básicas de la estupidez humana. Reseña anónima del libro de Carlos Cipolla en Youtube.

El enlace es este. Otros interesantes con un tratamiento serio del tema como la teoría sobre la estupidez del gran y santo Dietrich Bonhoeffer están aquíaquí, y aquí y sobre el efecto Dunning Kruger, acá.

Las 5 leyes básicas de la estupidez humana es un ensayo corto escrito por el economista italiano Carlos Cipolla. La primera edición fue escrita en inglés y publicada en 1976. Originalmente fue distribuida intencionalmente solo entre sus amigos de manera confidencial la razón es simple es el libro fue concebido como una especie de broma donde se abordaban temas serios de una manera lúdica y no demasiado seria. Al abordar un tema tan sensible, Cipolla elaboró una teoría extravagante e interesante que le valió un éxito increíble: no solo el ensayo fue publicado oficialmente, sino que también fue traducido a muchos idiomas y distribuido en todo el mundo. Ahora representa un hito en el tema controvertido de la estupidez humana.

Cipolla veía a las personas en cuatro categorías amplias:

1. Las personas inteligentes: contribuyen a la sociedad de manera positiva y aprovechan esas contribuciones en beneficio mutuo.

2. Las personas estúpidas: los esfuerzos de las personas estúpidas, por otro lado, son contraproducentes tanto para ellos mismos como para los demás.

3. Los bandidos. Entre estos dos grupos se encuentran los bandidos que persiguen sus propios intereses a expensas de otros.

4. Los indefensos, que hacen contribuciones positivas a la sociedad, pero son fácilmente explotados debido a su propia ingenuidad.

Se puede extraer una quinta categoría: las personas ineficaces de los otros grupos y es bueno algo así como evidente por sí mismo. En el mismo sentido, Cipolla veía el impacto del comportamiento humano de dos maneras:

Uno, el comportamiento que afecta a uno mismo ya sea de manera positiva o negativa.

Dos, el comportamiento que afecta a los demás, ya sea de manera positiva o negativa.

Ley número 1.

La conciencia humana de los efectos amplios de su comportamiento puede variar ampliamente entre las categorías; dicho esto, veamos entonces las cinco leyes básicas de la estupidez humana ley número siempre e inevitablemente todo subestiman el número de individuos estúpidos en circulación. Cipolla reconoció que es parte de la naturaleza humana minimizar la gravedad de un problema. Él estaba tan convencido de que éramos ingenuos ante el desafío que enfrentamos por la estupidez, que sugirió que cualquier suposición numérica del número de estúpidos entre nosotros resultaría ser una subestimación. No es casualidad que esta sea la primera Ley. Como dice la Biblia, "es infinito el número de los necios", así que la inteligencia consiste solo en ir aprendiendo a ser menos tonto.

Ley número 2 

La probabilidad de que cierta persona sea estúpida es independiente de cualquier otra característica de esa persona. Cipolla consideró la estupidez como una característica humana como tener el pelo rubio o los ojos negros; en consecuencia, no puede sino distribuirse aproximadamente.

Igualmente en todos los ámbitos de la sociedad independientemente del nivel educativo de las personas ya sea que uno frecuente círculos elegantes o se refugie entre caníbales ya sea que se encierre en un monasterio o decida pasar el resto de su vida en compañía de una pareja hermosa el hecho sigue siendo que siempre tendrá que lidiar con el mismo porcentaje de personas estúpidas concluyó en esta vista pesimista los seres humanos están condenados a lidiar con la estupidez; además, según Cipolla, no hay lugares más seguros ni soluciones para evitarla lo único que puedes hacer es aceptar esto y vivir con ello por el resto de tu existencia

Una persona estúpida es aquella que causa pérdidas a otra persona o a un grupo de personas mientras no obtienen nada o incluso pueden sufrir pérdidas. Carlos Cipolla consideró esto la ley dorada y más importante: nunca debe ser olvidada.

Ley número 3

Las personas estúpidas inevitablemente tomarán decisiones que nos confunden: su razonamiento simplemente se nos escapa. No es que tengan malas intenciones, es solo que son incapaces de ver los efectos de sus acciones en un contexto más amplio; es inútil, una pérdida de tiempo, incluso algo estúpido intentar razonar con ellas; a este respecto, Cipolla señaló que hay personas que por sus acciones ilógicas no solo causan daño a otras personas, sino también a ellos mismos tales personas pertenecen al género de los superestúpidos.

Ley número 4

Las personas no estúpidas siempre subestiman el poder dañino de los individuos estúpidos las personas no estúpidas siempre subestiman el poder dañino de los individuos estúpidos, en particular las personas no estúpidas constantemente olvidan que en cualquier momento y lugar, el hecho de pasar tiempo con personas estúpidas siempre resulta ser un costoso error. Para hacer esta ley más clara, Carlos Cipolla le agregó que las personas estúpidas son peligrosamente mortales porque las personas razonables encuentran difícil imaginar y entender el comportamiento estúpido en esta perspectiva los ataques de personas estúpidas siempre toman por sorpresa a las personas inteligentes.

Esto hace que sea aún más difícil elaborar una defensa racional; por otro lado, esto sería de poca utilidad ya que las acciones ilógicas no pueden ser entendidas utilizando la lógica como resultado al subestimar su poder y se está vulnerable siempre estará a merced de la imprevisibilidad de las personas estúpidas también estaba convencido de que las personas inteligentes tienden a pensar que las personas estúpidas solo pueden hacerse daño a sí mismas que son inmunes a sus acciones Este es un gran error que hace que las personas razonables se sientan invulnerables bajando peligrosamente su guardia.

Ley número 5

Las personas estúpidas son el tipo de personas más peligroso. Esta ley viene como una consecuencia natural dela ley básica anterior. Además, si no tiene idea de lo que Cipolla quiso decir aquí, lo dejó aún más claro al agregar el siguiente corolario: una persona estúpida es más peligrosa que un bandido. De las cinco leyes vistas hasta ahora, esta debería ser la más comprensible y razonable; de hecho, el sentido común nos dice que las personas inteligentes no importa cuán hostiles puedan ser: son predecibles. En contraste, las personas estúpidas no lo son. Esta sutil diferencia hace que las personas estúpidas sean increíblemente más temibles que las personas inteligentes. En conclusión, esto debería considerarse como una especie de compendio de toda su teoría sobre la estupidez humana.

Oros vídeos donde discuto las diferentes teorías de la estupidez te recomiendo estos dos vídeos: La teoría de la estupidez de Dietrich Bonhoeffer, y Por qué las personas estúpidas piensan que son inteligentes, donde discuto el efecto Dunning Kruger

Edward Bernays, el genio de la manipulación que además era sobrino de Freud

Edward Bernays y el arte de manipular, El Mundo, 22 NOV. 2017:

Tal día como hoy nació el creador de esta idea: un automóvil no lo necesitas [hace más me medio siglo] pero te hará más feliz. Y EEUU fue un país sobre ruedas. Y logró que las mujeres fumaran, que el hombre llevara el reloj en la muñeca. El Reina Sofía le recupera

Como los de muchos hombres verdaderamente poderosos o inmensamente ricos, el nombre de Edward Bernays, inventor de la propaganda y las relaciones públicas, resulta desconocido pese a haber sido uno de los más influyentes del siglo XX, que vivió casi completo. Si usted se siente atraído irremediablemente por un producto que, si se para a pensarlo, en realidad no necesita o siente simpatía por un partido al que no sabe por qué vota, es porque ha sucumbido, como todos, a las artes de ese mago de la manipulación que fue Edward Bernays.Antes de él, los estadounidenses no desayunaban huevos con panceta, los varones no llevaban reloj de pulsera y las mujeres no fumaban porque estaba mal visto. Todas estas transformaciones las ideó este vienés nacido el 22 de noviembre de 1891 y doble sobrino de Sigmund Freud: la madre de Bernays era Anna Freud, hermana del creador del psicoanálisis, quien estaba casada a su vez con Martha Bernays, hermana del padre de Edward. La familia de éste emigró a Estados Unidos siendo él niño. Para 1912, Bernays se había graduado en agricultura y en periodismo, a partir de lo cual empezó a publicar una revista sobre investigación médica. Desde Europa, su tío Sigmund le enviaba sus escritos por si eran de interés para el boletín, y así fue como el joven supo de la existencia de un conjunto de pulsiones inconscientes, a las que su tío aludía como el ello, que gobernaban buena parte del proceder de cualquier individuo. Todo el trabajo de Bernays tomó como fundamento el descubrimiento de esos mecanismos que pronto entendió susceptibles de ser manipulados con fines económicos -de consumo- y políticos. No había atisbo de mala conciencia en él, convencido como estaba de que la propaganda y su versión light, las relaciones públicas, eran disciplinas necesarias para «convivir en una sociedad funcional sin sobresaltos». En su libro de 1928 titulado precisamente Propaganda, resumía su maestría en el arte de conseguir que las personas se comportaran de manera irracional si se lograba vincular los productos (o las políticas) con sus emociones y deseos más acendrados. Durante la I Guerra Mundial, se puso al servicio del Gobierno de EEUU para motivar a los jóvenes para que se alistaran en el ejército. Después lo contrató la Compañía Americana de Tabaco, que no tenía bastante con los millones de fumadores varones que había en el país. Bernays envió a un grupo de jóvenes modelos a marchar en el desfile de Pascua de Nueva York y avisó a la prensa de que aquellas mujeres iban a encender «antorchas de libertad». A su señal, las chicas encendieron cigarrillos Lucky Strike frente a los fotógrafos. La operación la remató contratando a cientos de mujeres para que fumasen en lugares públicos y pagando a directores de cine para que las actrices fumasen en sus películas, hecho que al poco tiempo se consideró moderno y sofisticado. Las tabacaleras y el propio Bernays se hicieron ricos con aquella campaña maestra en lo que hoy llamamos normalización de un hábito mal visto con anterioridad. El agrónomo y periodista vio antes que nadie el potencial mercantilista de las teorías de su tío. Él hizo surgir la asociación entre automóvil y masculinidad, y la del reloj de muñeca -que por iniciativa suya comenzaron a llevar los soldados en las trincheras- con la hombría y el coraje. La conquista por las tabacaleras del mercado femenino obedecía a un mecanismo semejante que debía mucho a Freud: fumar era para ellas una manera de apropiarse de un atributo masculino, algo que según el eminente psiquiatra desea inconscientemente toda mujer. Bernays, de confesión judía, dijo haberse distanciado del término propaganda cuando se enteró de que Goebbels consultaba su libro Cristalizando la opinión pública. Pero propaganda era convencer a cada estadounidense de que necesitaba un coche -y que, por tanto, había que desmantelar los tranvías- y, sobre todo, orientar al electorado hacia un modelo de dos partidos hegemónicos para evitar la fragmentación del voto y el «caos».

Los lobbies estaban encantados con Bernays. El del sector cárnico lo enroló para hacer ver a todos los norteamericanos que un desayuno en condiciones debía incluir bacon, y así quedó establecido en cada hogar del país y luego en los hoteles de todo el mundo. La United Fruit Company acostumbraba a poner y quitar gobernantes en las repúblicas centroamericanas, que Bernays bautizó como «bananeras». Cuando el Gobierno reformista de Guatemala quiso frenar su poder, el publicista se las arregló para hacerlo quedar ante el mundo como «comunista».En sus más de 103 años de vida -falleció en 1995-, Bernays trabajó para mejorar la imagen de firmas como Monsanto, Shell, Boeing, General Motors, Pfizer y Goodyear. Asesoró en cuestión de relaciones públicas a varios presidentes de EEUU, entre ellos Wilson, Hoover y Eisenhower. Calvin Coolidge fue quien más necesitó de sus servicios: para contrarrestar su imagen de persona distante y poco empática, a Bernays se le ocurrió organizar desayunos en la Casa Blanca a los que acudían estrellas de Hollywood, maniobra con la que logró que apareciera en las portadas de los periódicos.Una buena manera de profundizar en la figura de Bernays se presentará el próximo 4 de diciembre con la proyección en el Reina Sofía de la serie de Adam Curtis para la BBC El siglo del yo, que presentará el periodista de EL MUNDO Luis Martínez.

Cómo hay que manejar la mente sin que se note

El sueño de Bernays se ha materializado, dos décadas después de su muerte, en realidades hoy comunes como los expertos en mejorar reputaciones en internet y, a nivel general, en el manejo de los asuntos mundiales por parte de grandes corporaciones. Él hablaba de un «gobierno invisible» que todo lo podía: «Nuestras mentes son moldeadas, nuestros gustos son formados, nuestras ideas son sugeridas, mayormente por hombres de los que nunca hemos oído hablar...». Hombres como él mismo. En 1955 publicó el libro 'La ingeniería del consentimiento', que definió como «la manera de controlar la mente de la gente sin que ésta lo note» y que venía a ser, claro, 'la negación del consentimiento'.

Julia de Burgos, "A Julia de Burgos"

Julia de Burgos, poetisa cubana: "A Julia de Burgos"


A Julia de Burgos


Ya las gentes murmuran que yo soy tu enemiga

porque dicen que en verso doy al mundo tu yo.


Mienten, Julia de Burgos. Mienten, Julia de Burgos.

La que se alza en mis versos no es tu voz: es mi voz

porque tú eres ropaje y la esencia soy yo; y el más

profundo abismo se tiende entre las dos.


Tú eres fría muñeca de mentira social,

y yo, viril destello de la humana verdad.


Tú, miel de cortesana hipocresía; yo no;

que en todos mis poemas desnudo el corazón.


Tú eres como tu mundo, egoísta;

yo no; que en todo me lo juego a ser lo que soy yo.


Tú eres solo la grave señora señorona; yo no,

yo soy la vida, la fuerza, la mujer.


Tú eres de tu marido, de tu amo; yo no;

yo de nadie, o de todos, porque a todos, a

todos en mi limpio sentir y en mi pensar me doy.


Tú te rizas el pelo y te pintas; yo no;

a mí me riza el viento, a mí me pinta el sol.


Tú eres dama casera, resignada, sumisa,

atada a los prejuicios de los hombres; yo no;

que yo soy Rocinante corriendo desbocado

olfateando horizontes de justicia de Dios.


Tú en ti misma no mandas;

a ti todos te mandan; en ti mandan tu esposo, tus

padres, tus parientes, el cura, la modista,

el teatro, el casino, el auto,

las alhajas, el banquete, el champán, el cielo

y el infierno, y el qué dirán social.


En mí no, que en mí manda mi solo corazón,

mi solo pensamiento; quien manda en mí soy yo.


Tú, flor de aristocracia; y yo, la flor del pueblo.

Tú en ti lo tienes todo y a todos se lo debes, mientras que yo, mi nada a nadie se la debo.


Tú, clavada al estático dividendo ancestral,

y yo, un uno en la cifra del divisor

social somos el duelo a muerte que se acerca fatal.


Cuando las multitudes corran alborotadas

dejando atrás cenizas de injusticias quemadas,

y cuando con la tea de las siete virtudes,

tras los siete pecados, corran las multitudes,

contra ti, y contra todo lo injusto y lo inhumano,

yo iré en medio de ellas con la tea en la mano.

domingo, 3 de septiembre de 2023

El miedo y el señorío del hambre, por José Luis Sampedro

De una conferencia de José Luis Sampedro: "Un sistema no apto para la democracia":

[El gobierno inicuo se debe] a una de las fuerzas más importantes que motivan al hombre, que es el miedo; se debe al miedo. El gobernar a base de miedo es eficacísimo: si usted amenaza a la gente con que los va a degollar, luego no los degüella, pero los explota, los engancha a un carro, los azota. Y dicen: "Bueno, por lo menos...", y se dice eso que es tan grave: "Virgencita, que me quede como estoy. El miedo hace que no se reaccione, el miedo hace que no se siga adelante, el miedo, mire usted, es mucho más fuerte así desgraciadamente que el altruismo, que el amor, que la bondad; el miedo asusta mucho y si empieza usted por dar un shock y si empieza usted por asustar a la gente muchísimo, luego les castiga un poco menos y dicen ¡qué bien, no nos han fusilado; bien! Es el miedo, y el miedo nos lo están dando todos los días: los periódicos, la televisión y todo. Si su manera de pensar es más libre, un librepensador es más libre dentro de un calabozo en que el guardia que lo custodia, porque el guardia está defendiendo lo que no es suyo y fastidiando al que está a lo que es suyo; y no es libre el guardia, no: no es libre, es libre el de dentro.

Hay una anécdota preciosa que la contaba Salvador de Madariaga en un libro suyo que llamaba España. Se publicó allá por los años 30. Un tipo rico en Andalucía durante la República, en una época que hay elecciones, manda al capataz de un cortijo a hablar con los jornaleros que están en la plaza, y les dan un duro o dos duros para que voten por el cacique; y uno al que le dan unos duros de esos, se los tira y grita: ¡En mi hambre mando yo! De lo poco que puede decir el hambriento: que por lo menos en su hambre manda él. Eso lo he comentado mucho y lo he dicho en mis clases: me impresiona. ¿Qué se le puede decir a un hombre que está en la nada? Pues que, sea el que sea, es consciente de que tiene esa libertad interior que te aprueba ante ti mismo con razón.


sábado, 2 de septiembre de 2023

Señales de inteligencia colaborativa

En general, el estúpido lo da todo por hecho, mientras que el inteligente duda de todo, y se da cuenta del trabajo que todo supone, me parece a mí. Es el que te advierte "ten cuidado con lo que deseas, que lo podrías conseguir". Transcripción revisada de "10 señales de inteligencia que no pueden ser falsificadas", video de Youtube.

Son estas:

1) Alta creatividad.

2) Curiosidad natural.

3) Sentido del humor natural.

4) Mente abierta (no necesariamente tolerante e influenciable, pero, va con el punto 2, ser curioso e interesado por lo nuevo).

5) Amor por la soledad.

6) Adaptabilidad y sentido de responsabilidad.

7) Limitaciones, carencias y defectos aceptados.

8) Fuerte identidad (autenticidad de virtudes y defectos).

9) Tener varios intereses (talentos, pasiones, vocaciones, pasatiempos varios).

10) Sensibilidad social / alta empatía.


Todos hemos conocido a personas que a primera vista parecían muy inteligentes, tal vez, simplemente, gracias a su habilidad para usar palabras elegantes o citar frases de autores famosos durante una conversación, frases que probablemente ni siquiera comprendían completamente. Hay una diferencia entre sonar inteligente y realmente ser inteligente; pertenece a la naturaleza humana sobreestimarse a uno mismo: la mayoría de nosotros, incluyéndome a mí mismo, probablemente creemos que somos más inteligentes de lo que realmente somos; (véase el Efecto Dunning-Kruger), pero, si este es el caso, ¿cómo podemos identificar a una persona realmente inteligente sin ser engañados?  Veremos 10 señales de inteligencia que difícilmente pueden falsificar; veamos cuáles:


1. Gran creatividad 

Las ideas innovadoras y las soluciones creativas son prácticas diarias para las personas

altamente inteligentes; la creatividad es, en realidad, una de las formas más altas

de inteligencia porque requiere pensar fuera de la caja las personas

inteligentes pueden ver las cosas desde diferentes perspectivas y destacarse en

la resolución de problemas, así como ser buenos para convertir sus ideas en realidad


2: Curiosidad natural 


Las personas realmente inteligentes generalmente están fascinadas por seguir

aprendiendo cosas nuevas y, por lo tanto, son conscientes de que tienen lagunas

que llenar saben que no lo saben todo no tienen

miedo de aprender cosas nuevas y no se detienen solo en mirar la superficie de

las cosas, en cambio, intentan profundizar para obtener más información al respecto


3 Capacidad para ser humorísticos


Varios estudios han demostrado que tener un buen sentido del humor Y ser capaz de

bromear sobre tus debilidades sin tomarte siempre demasiado en serio es

una gran señal de inteligencia el humor y la inteligencia están directamente

relacionados de hecho se ha descubierto que, los comediantes en particular,

obtienen puntajes más altos que el promedio en los exámenes de CI. Esto se

debe a que el humor no solo implica procesar información, sino también

encontrar un punto de vista diferente de esta información y un momento perfecto

para contar el chiste; además requiere una mayor inteligencia verbal. Esta

habilidad única junto con su presencia de ánimo les permite convertir incluso

las circunstancias y cosas más insignificantes en que nos hará reír .


4 La mente abierta


En mi opinión, quizás la marca más identificativa que distingue a

las personas inteligentes de las no inteligentes es la mente abierta

demasiadas personas enorgullecen de lo que creen y a menudo asocian su sentido

de sí mismos con su punto de vista rígido sin interpretar ciertas

situaciones desde una perspectiva diferente, a menudo careciendo de

objetividad incluso ante las pruebas ser de mente abierta es lo contrario esto no

significa ser crédulo o fácilmente influenciable para cambiar sus opiniones, 

sino no tener miedo de explorar nuevos conceptos e ideas si hay un denominador

común de las personas cerradas mentalmente probablemente sea que han

viajado muy poco o han interactuado muy poco con personas de otras culturas.

Desafortunadamente vivir encerrado en su propio pequeño círculo de amigos sin

explorar o aprender sobre nuevas realidades no ayuda a abrir su mente


5 Amor por la soledad 


Las personas inteligentes necesitan tiempo para sí mismas para recargar energías esto no

significa que odien a las personas, pero significa que les gusta tener tiempo

para reflexionar, estudiar experiencias pasadas y planificar su próximo

movimiento entienden que Cuanto más tiempo pasen socializando menos tiempo tendrán para

sí mismos y sus ambiciones por supuesto tienen amigos y familiares Que valoran

pero también necesitan tiempo a solas.


6 Adaptabilidad y sentido de responsabilidad


Hay una categoría de personas que no hace más que quejarse si tú, como yo,

todavía usas Facebook. Fíjate en tu amigo que hoy se queja de este o aquel

político, y ten por seguro que ese mismo amigo mañana se quejará de su empleador;

la próxima semana se quejará de las mujeres el próximo mes del árbitro que

hizo perder a su equipo favorito etcétera, etcétera.

En resumen, todo lo que va mal en su vida siempre es culpa de otra persona.

Esta incapacidad para asumir responsabilidades está dictada por una

falta de autoconciencia y la imposibilidad individual de adaptarse a

los cambios y situaciones nuevas que puedan surgir. Por ejemplo, si en el

trabajo ha estado haciendo su trabajo de la misma manera durante 10 años y ahora

se le pide que lo haga de manera diferente y más eficiente debido a la

introducción de un nuevo programa innovador, ten por seguro que encontrará

una razón para quejarse. Si no quieres quemar puntos de CI, te recomiendo

encarecidamente que evites a estas personas tóxicas siempre que puedas,

tanto en el trabajo como en tu vida privada.


7 Reconocimiento de las propias limitaciones


Como se mencionó anteriormente, la autoconciencia es clave para la auto

mejora las personas demasiado orgullosas tendrán dificultades para admitir sus

defectos y Esto será un obstáculo problemático para superar si quieren

crecer y mejorar antes de poder resolver un problema, se debe tener la capacidad de analizarlo

objetivamente. Las personas inteligentes no vinculan su autoestima a su ego y de

esta manera les resulta más fácil aceptar sus errores y avanzar: ser honesto consigo mismo y con los demás es una cualidad admirable que demuestra una gran inteligencia. 


8 Fuerte identidad 


Las personas inteligentes tienen el maravilloso don de la autoconciencia, lo

que significa que están conectadas con su psique y conocen su valor sus

fortalezas y debilidades, metas y ambiciones. Esto no significa que piensen

que son perfectas, más bien lo contrario: aceptan sus inseguridades en lugar de

fingir que no están allí; sin embargo, su sentido de identidad no vacila solo

porque tienen debilidades. Las personas inteligentes trabajan en ellas para

superarlas mientras continúan desarrollando sus fortalezas.


9 Tener varios intereses


Las personas inteligentes les gusta cultivar intereses diversos; tienen pasatiempos

que prefieren, pero no se alejan cuando se trata de probar algo nuevo e incluso

pueden aburrirse de hacer las mismas cosas una y otra vez más rápido que la

persona promedio. Suelen cultivar diferentes proyectos e

intereses al mismo tiempo. Mientras muchas personas buscan formas de pasar

el tiempo, las personas inteligentes se enfocarán en aprovechar al máximo el

tiempo limitado que tienen siendo conscientes de que cada minuto perdido

se ha ido para siempre 

10 Sensibilidad hacia los sentimientos de los demás


La inteligencia no solo se determina por un alto coeficiente intelectual: la

inteligencia emocional es igual de importante y desempeña un papel

significativo en la consecución de relaciones de calidad, éxito y felicidad

en general. En este canal puedes encontrar varios vídeos donde hablo sobre inteligencia

emocional he puesto todos los enlaces abajo en la descripción en caso de que

quieras aprender más sobre este tema un coeficiente emocional bien desarrollado

te permite lidiar con el estrés y te ayuda a entender mejor a los demás

permitiéndote ser sensible a los sentimientos y emociones de las personas

que te rodean también te permite responder adecuadamente a sus

necesidades. De hecho, la empatía es uno de los elementos más importantes de la

inteligencia emocional.


Si disfrutaste del vídeo te sugiero que veas el vídeo Los 9 tipos de

inteligencia que puedes encontrar en este canal si aún no lo has hecho te

invito a que te suscribas al Canal y actives la campana de notificaciones;

gracias y que tengas un gran día.


El pintor Ressendi

Hay una buena monografía en Youtube de Antonio García Villarán y un artículo del Abc sobre el gran pintor Baldomero Romero Ressendi:

Félix Machuca, "Baldomero Romero Ressendi: La vida loca", Abc de Sevilla, 21/09/2019:

Nunca mentía en sus retratos, le gustaba el flamenco y se volvía loco con las flamencas

De Valle dijo Primo de Rivera que era un insigne artista y un extravagante ciudadano. Al pintor alcalareño Baldomero Romero Ressendi la frase se le queda corta. Porque no hay ninguna que pueda encerrar tanta genialidad, extravagancia, bohemia, malditismo y rebeldía para definir algo tan indefinible como fue el carácter de aquel genial artista. Para muchos el mejor pintor que dio la Sevilla del siglo pasado. Para otros un colaboracionista con el régimen de Franco que le hizo disfrutar del patronazgo del general gallego. En esto, como en todos los blasones que te pinta la envidia, no hay un solo color que sea sincero. Porque, entre la leyenda urbana y la realidad, se cuenta que Romero Ressendi abandonó tras un siroco de los suyos la obra pictórica que se le habría encargado para Cuelgamuros. Y también me asegura un afamado pintor actual que, por otro arrebato marca de la casa, dejó a medio terminar un retrato del señor de los pantanos.

«Fue un pintor inclasificable pero entraba de lleno en el planeta de los extravagantes, rebeldes, malditos, bohemios y geniales»

No se casaba con nadie aunque le imputan 19 hijos, tantos como aquellos patriarcas bíblicos que fundaron sagas antediluvianas. A este genial pintor sevillano solo lo definen sus actos y sus caprichos. Puestos a enumerarlos digamos que odiaba pintar marinas y paisajes, nunca mentía en sus retratos, le gustaba el flamenco y se volvía loco con las flamencas. En la mesilla de noche tenía un libro de anatomía que estudiaba continuamente, hacia yoga, coleccionaba piedras y fósiles, le gustaba limpiar a diario las cincuenta jaulas de pájaros que tenía en su casa, entraba a pintar en el estudio a las siete de la mañana y salía a las doce, montaba a caballo y cuando iba a Casa Carreras a comprar pinturas volvía tres días después…Brilla con esplendor en ese panteón de geniales ilustres locales como aquel poeta, ganadero y estrellero que quiso crear toros con los ojos verdes…

«Le encargaron pintar los murales de Cuelgamuros pero no los hizo por no vestirse como le exigían. Los bocetos se guardaron en una cocina de Olivares»

Su cuadro «Los borrachos» huele a vino gordo y cabezudo. «El Cristo yacente» es un brutal alegato a la barbarie de los hombres y al verlo nos duele la sangre derramada. En el retrato del «Papa Negro» nos intimida la pose soberbia del rey de la saga Bienvenida. Y un boceto genial de Balenciaga nos sigue pareciendo el retrato que le pinta a la marquesa de Saltillo.

En «Las Tentaciones de San Jerónimo» no podemos estar más de acuerdo con el cardenal Segura: el buen ermitaño sucumbió al placer de la carne de hembra como refleja el éxtasis de su rostro. Otra cosa es que eso fuera motivo para excomulgar al artista. Que no me lo imagino con el sueño perdido y el alma encogida al conocer la noticia. Dormía poco Ressendi porque se bebió la vida a cada minuto. El anticuario Julio Morales guarda con emoción un dibujo rápido, trazado a la velocidad de vértigo con la que interpretaba el mundo, donde se ve a un tipo con un sombrero con forma de botella. Sus mensajes llevaban siempre la etiqueta negra de los buenos alambiques. Y entre el vino, los flamencos, las flamencas, los delirios de sus personajes y la extravagancia de su rebeldía creó el expresionismo meridional, en una tierra donde las paredes de las casas bien estaban reservadas para los cánones clásicos y los angelitos de mofletes rosados. El arco del triunfo de Ressendi tuvo que tener la amplitud del que se hizo levantar Adriano en Atenas. Porque por allí se pasaba una parada militar si hacía falta. Me cuentan los que accedieron a su círculo mágico que un general de aviación de la época le abrió estudio en el cuartel general de la segunda región aérea, donde se daban cita los artistas más considerados de entonces.

«El cardenal Segura lo excomulgó tras reflexionar sobre el cuadro “Las tentaciones de San Jerónimo” donde el eremita sucumbe al pecado carnal»

Allí pintaban, charlaban, cantaban y le cambiaban el paso a Jhonny Walker al grito de viva la vida loca en oposición al viva la muerte de los centauros del desierto. Antonio Morales, restaurador y anticuario, vio cómo el mercado de obras del genial pintor se convertía en una guerra de copistas. Algunos fueron tan torpes que trataron de falsificar lo que era auténtico, como aquel cuadro donde la firma de Ressendi iba oculta tras el marco y el copista imitó su rúbrica de forma tosca y torpe. El cuadro se titulaba «Mujeres». Tantas tuvo y gozó que, al final de su vida, el caballo viejo, lento y cansado, se echó en manos de soledad. Ella fue su última compañera. Una soledad infinita en la calle melancolía de Madrid donde murió, a los 55 años, de una enfermedad incurable: Ressendi.

El Club Los Leones le encargó a Juan Valdés que se hiciera cargo de trasladar el cadáver. Una serie de complicaciones burocráticas obligaron a Juan a poner tan delicado asunto en manos de un próspero industrial de Los Remedios que se dedicaba a la compra venta de coches y que tenía una colección notable de cuadros del finado. Un hijo de Romero Ressendi le agradeció a Valdés sus desvelos y le regaló la pata de un rinoceronte que utilizaba el pintor a modo de reposa pinceles en su estudio. Solo en la pata de una bestia podían descansar los rojos atormentados de un pintor tan brutal…

viernes, 1 de septiembre de 2023

El concepto de pobreza. Apólogo

De Quora:

UN DÍA, UN PADRE RICO llevó a su hijo de viaje a un pueblo.

Quería mostrarle lo pobre que puede ser alguien. Pasaron un tiempo en la granja de una familia pobre…

A la vuelta del viaje, el padre le preguntó a su hijo:

¿Qué tal el viaje? "Fue genial papá".

¿Has visto cómo vive la gente pobre? Preguntó el padre.

"Oh, sí", dijo el hijo.

Entonces, dime, ¿qué has aprendido del viaje? Preguntó el padre.

El hijo respondió: tenemos un perro, ellos tienen cuatro, tenemos una piscina, ellos tienen ríos, tenemos luces de tubo por la noche, ellos tienen estrellas, compramos alimentos, ellos cultivan los suyos, tenemos muros para protegernos, ellos tienen amigos.

Nosotros tenemos televisión, ellos pasan tiempo con la familia y los parientes.

El padre del niño quedó sin palabras:

Entonces su hijo añadió: "Gracias papá, por mostrarme lo pobres que somos".

jueves, 31 de agosto de 2023

James Haught, El largo, largo camino hacia la igualdad de las mujeres

James Haught, El largo, largo camino hacia la igualdad de las mujeres

El centenario este mes de la 19ª Enmienda brinda una ocasión para trazar el largo, largo camino hacia la igualdad de las mujeres y para darse cuenta de cómo la religión ha desempeñado un papel profundamente negativo.

Durante milenios, la inferioridad femenina fue presumida y obligatoria en prácticamente todas las culturas humanas. A lo largo de la mayor parte de la historia, la fuerza muscular de los hombres más corpulentos les dio dominio, dejando a las mujeres en un estatus inferior: a menudo meras posesiones de los hombres, confinadas al hogar, rara vez educadas y con pocos derechos.

En la antigua Grecia, las mujeres eran mantenidas en el interior, rara vez vistas, mientras que los hombres realizaban todas las funciones públicas. Las mujeres no podían asistir a la escuela ni poseer propiedades. Una esposa no podía asistir a eventos sociales masculinos, incluso cuando su marido organizaba uno en casa. Aristóteles creía en los “esclavos naturales” y escribió que las mujeres son criaturas inferiores a las que hay que cuidar, como un granjero cuida su ganado.

Hasta la época medieval, las hijas eran secundarias y las herencias iban a los hijos primogénitos. Prevaleció el gobierno masculino.

A medida que florecía la Ilustración en el siglo XVIII, surgieron llamados a favor de los derechos de las mujeres. El francés Talleyrand escribió que sólo los hombres requerían una educación seria (“los hombres están destinados a vivir en el escenario del mundo”) y las mujeres deberían aprender simplemente a administrar “el hogar paterno”. Esto enfureció a la rebelde inglesa Mary Wollstonecraft (1759-1797), quien escribió Una reivindicación de los derechos de la mujer , sosteniendo que las mujeres tienen potencial para una vida pública plena. (Su hija se casó con el poeta Percy Shelley y creó Frankenstein ).

El reformador John Stuart Mill (1806-1873) escribió La subyugación de las mujeres en 1869, después de que su esposa escribiera La emancipación de las mujeres , en el que pedía el derecho femenino al voto. Como miembro del Parlamento de Inglaterra, Mill buscó el voto de las mujeres y se convirtió en presidenta de la Sociedad Nacional para el Sufragio de las Mujeres. "La subordinación legal de un sexo a otro es incorrecta en sí misma y ahora es uno de los principales obstáculos al mejoramiento humano", escribió Mill.

El mundo occidental luchó casi un siglo antes de que las mujeres finalmente obtuvieran el derecho al voto.

Elizabeth Cady Stanton (1815-1902) era la brillante hija de un juez del estado de Nueva York. Pocas escuelas admitían niñas, por lo que su padre hizo arreglos para que ella asistiera a la Johnstown Academy, solo para hombres. La hija se indignó por las leyes que prohibían a las mujeres poseer propiedades o controlar sus vidas. Se casó con un abogado abolicionista y lo acompañó a Londres para una conferencia mundial contra la esclavitud. A las mujeres no se les permitía hablar; Se sentaron en silencio detrás de una cortina mientras los hombres hablaban.

De regreso a Estados Unidos, se unió a algunos amigos cuáqueros para organizar una asamblea en 1848 en Seneca Falls, Nueva York, que lanzó el movimiento moderno por la igualdad de las mujeres. Frederick Douglass defendió la controvertida propuesta de Stanton instando a los delegados a exigir el sufragio femenino. Más tarde se unieron a Stanton los unitarios Susan B. Anthony, Lucy Stone y Ralph Waldo Emerson, entre otros, en una lucha de toda la vida por los derechos de las mujeres.

Stanton acusó amargamente a la religión occidental patriarcal de mantener subyugadas a las mujeres. En sus memorias de 1898, Ochenta años y más , escribió: “El recuerdo de mi propio sufrimiento me ha impedido seguir alguna vez a un alma joven con las supersticiones de la religión”. En la revista Free Thought, afirmó: “La Biblia y la iglesia han sido los mayores obstáculos en el camino de la emancipación de la mujer. … Todo el tono de la enseñanza de la iglesia con respecto a las mujeres es, hasta el último grado, despectivo y degradante”. Stanton dijo que las religiones son meras “invenciones humanas” (en su mayoría inventadas por hombres) que inventan el pecado original para culpar a Eva y a las mujeres. Afirmó que “el clero bautizaba cada nuevo insulto y acto de injusticia en nombre de la religión cristiana”.

La Guerra Civil suprimió temporalmente los esfuerzos sufragistas, pero estallaron de nuevo cuando la 15ª Enmienda, ratificada en 1870, permitió votar a los hombres negros, pero no a las mujeres de ningún color. Las demandas aumentaron durante décadas. Mark Twain pronunció un discurso pidiendo el voto femenino. Varios grupos sufragistas salieron a las calles, algunos más militantes que otros. El Partido Nacional de la Mujer, dirigido por Alice Paul, fue el más duro, manifestó piquetes frente a la Casa Blanca y soportó abucheos masculinos y agresiones físicas.

El presidente Woodrow Wilson intentó ignorar el clamor. Cuando una delegación rusa visitó la Casa Blanca, los piquetes portaban pancartas que decían “Estados Unidos no es una democracia. A veinte millones de mujeres se les niega el derecho al voto”. Los manifestantes organizaron desfiles en Washington que fueron atacados por turbas que enviaron a algunos a hospitales. Las mujeres que protestaban en las aceras fueron encarceladas por cargos absurdos de “obstrucción del tráfico”. Cuando los manifestantes se negaron a pagar las multas, fueron encerrados con delincuentes. Paul fue sentenciado a siete meses. Se declaró en huelga de hambre y fue alimentada a la fuerza.

Finalmente, Wilson cambió de posición en 1918 y apoyó el derecho al voto femenino. El Congreso aprobó la 19ª Enmienda, que fue ratificada en 1920, permitiendo que las mujeres votaran. Estados Unidos no fue la primera nación donde las mujeres obtuvieron pleno derecho de voto, pero sí una de las primeras.

En todo el mundo, le siguieron otras naciones, algunas más lentamente que otras. En Suiza, las mujeres no obtuvieron plenos derechos de voto en todos los distritos hasta 1991. Las mujeres de Arabia Saudita finalmente lograron solo una votación parcial en diciembre de 2015. Y como han señalado las mujeres de color, a muchas mujeres negras, asiático-americanas y nativas americanas se les negó el derecho a votar. voto que les prometió la 19ª Enmienda, ya sea mediante leyes racistas o tácticas de Jim Crow, durante hasta tres generaciones más.

Las luchas sociales realmente nunca terminan. Las mujeres occidentales todavía no han logrado la igualdad total. Su salario sigue siendo inferior al promedio de los trabajadores varones. Algunas culturas musulmanas y africanas todavía subyugan a las mujeres, con “asesinatos por honor”, ​​niñas con menor educación y mutilaciones genitales realizadas para someter su deseo sexual y mantenerlas “puras” para los maridos.

Un informe de Amnistía Internacional no muy lejano decía:

En Estados Unidos, una mujer es violada cada seis minutos; Una mujer es maltratada cada 15 segundos. En el norte de África, 6.000 mujeres son mutiladas genitalmente cada día. Este año, más de 15.000 mujeres serán vendidas como esclavas sexuales en China. Doscientas mujeres en Bangladesh quedarán horriblemente desfiguradas cuando sus maridos o pretendientes despreciados las quemen con ácido. Más de 7.000 mujeres en la India serán asesinadas por sus familias y suegros en disputas por la dote. La violencia contra las mujeres tiene sus raíces en una cultura global de discriminación que niega a las mujeres la igualdad de derechos que a los hombres y que legitima la apropiación de los cuerpos de las mujeres para gratificaciones individuales o fines políticos. Cada año, la violencia en el hogar y la comunidad devasta las vidas de millones de mujeres.

Obviamente, la batalla por la plena igualdad de las mujeres aún no ha terminado.

Este artículo es una adaptación de una columna escrita para la edición de agosto-septiembre de 2020 de Free Inquiry.

La Ilustración sigue ganando, por James Haught

James Haught, La Ilustración sigue ganando, 2023-07-22

La Ilustración sigue ganando


Si estudias historia, observarás episodios que han cambiado la civilización.

Por ejemplo, hace unos tres siglos se produjo una transformación histórica cuando importantes pensadores comenzaron a defender la democracia, los derechos humanos y las libertades personales. Este período se conoció como la Ilustración. Desencadenó el conflicto de larga data que aún impulsa gran parte de la política.

Thomas Hobbes (1588-1679) escribió que la vida puede ser “desagradable, brutal y corta” a menos que las personas se comprometan a un “contrato social” bajo un gobierno que las proteja. Dio a entender que los reyes no gobiernan por derecho divino y que la autoridad última recae en la ciudadanía. Los obispos intentaron ejecutar a Hobbes por ateo, pero Hobbes quemó sus papeles y, en ocasiones, se escondió en el exilio.

John Locke (1632-1704) negó que los reyes fueran elegidos por Dios y recomendó la separación de la iglesia y el estado para evitar guerras y masacres basadas en la fe. Locke, uno de los primeros defensores de la democracia, argumentó que el gobierno debe basarse en el consentimiento de los gobernados.

El barón de Montesquieu (1689-1755) propuso una república democrática con poderes divididos entre los poderes ejecutivo, legislativo y judicial.

Voltaire (1694-1778) fue encarcelado por burlarse de un regente y luego emergió para convertirse en un cruzado de por vida contra los abusos de los nobles y clérigos gobernantes.

Los fundadores de Estados Unidos (como Thomas Jefferson, John Adams, James Madison y Benjamin Franklin) fueron brillantes radicales que absorbieron las ideas de la Ilustración e incorporaron muchas de ellas a la primera democracia moderna. Un fundador menos conocido, George Mason, insistió en una Declaración de Derechos para proteger a cada persona del gobierno y la tiranía de la mayoría.

La premisa de la Ilustración de que todo individuo merece libertades personales también generó la Declaración de los Derechos del Hombre y del Ciudadano en Francia, la Declaración Universal de Derechos Humanos de las Naciones Unidas y otros códigos morales.

La Ilustración no sólo produjo la democracia moderna, sino que también sentó las bases de los valores políticos liberales que aún hoy logran victorias. Durante tres siglos, a trompicones, el progreso occidental ha sido principalmente una crónica de la derrota de los progresistas en la resistencia conservadora. Los reformadores derribaron repetidamente viejos privilegios, jerarquías y establecimientos. Mire el registro histórico:

Los conservadores intentaron mantener la esclavitud, pero perdieron.

Intentaron mantener la segregación racial, pero perdieron.

Prohibieron el matrimonio entre mestizos, pero perdieron.

Intentaron bloquear el voto de las mujeres, pero perdieron.

Intentaron detener la revolución sexual, pero perdieron.

Intentaron impedir que las parejas utilizaran métodos anticonceptivos, pero fracasaron.

Buscaron encarcelar a mujeres y médicos que interrumpen embarazos, pero perdieron.

Intentaron seguir encarcelando a los homosexuales, pero perdieron.

Intentaron detener el matrimonio entre personas del mismo sexo, pero perdieron.

Intentaron obstruir las pensiones del Seguro Social para las personas mayores, pero perdieron.

Intentaron prohibir los sindicatos, pero perdieron.

Intentaron impedir la compensación por desempleo para los desempleados, pero perdieron.

Intentaron derrotar a Medicare y Medicaid, pero perdieron.

Intentaron mantener las tiendas cerradas en sábado, pero perdieron.

Prohibieron el alcohol durante la Prohibición, pero finalmente perdieron.

Apoyaron la oración obligatoria del gobierno en la escuela, pero perdieron.

Se opusieron a los cupones de alimentos para los pobres, pero perdieron.

Prohibieron la enseñanza de la evolución en las escuelas, pero perdieron.

Intentaron impedir la expansión de la atención médica mediante la Ley de Atención Médica Asequible, pero perdieron.

Una y otra vez, a través de batallas culturales recurrentes, han prevalecido los principios progresistas que comenzaron con la Ilustración.

¿Cuál será el próximo frente en la guerra cultural? Pase lo que pase, probablemente sea seguro predecir el ganador final. Martin Luther King Jr. (parafraseando al ministro unitario Theodore Parker) dijo: “El arco del universo moral es largo, pero se inclina hacia la justicia”.

La transformación provocada por la Ilustración está en curso.

La columna es una adaptación y actualización de un artículo publicado por primera vez en septiembre de 2015 en Charleston Gazette.

Sam Vaknin, El futuro del libro

Sam Vaknin, El futuro del libro

Uno de los primeros actos de la Asamblea Nacional francesa en 1789 fue emitir esta declaración: “La libre comunicación del pensamiento y de la opinión es uno de los derechos más preciosos del hombre; por tanto, todo ciudadano puede hablar, escribir e imprimir libremente”. La UNESCO todavía define "libro" como "una publicación impresa no periódica de al menos 49 páginas sin incluir las portadas".

Sin embargo, ¿las innovaciones de los últimos veinte años han transformado irreversiblemente el concepto de “libro”?

Los libros electrónicos no son una idea novedosa. Vannevar Bush escribió en 1945 en The Atlantic:

“Aparecerán formas totalmente nuevas de enciclopedias, ya preparadas con una malla de senderos asociativos que las atraviesan, listas para ser lanzadas al memex y allí amplificadas”.

Cuando Alan Kay creó el Dynabook, un prototipo de cartón de un lector de libros electrónicos similar a una tableta, en 1968, declaró:

“Creamos un nuevo tipo de medio para impulsar el pensamiento humano, para amplificar el esfuerzo intelectual humano. Pensamos que podría ser tan importante como la invención de la imprenta por parte de Gutenberg hace 500 años”.

Robert Coover, de la Universidad de Brown, opinó en el New York Times en 1992 que el “fin de los libros” está cerca:

“Fluidez, contingencia, indeterminación, pluralidad, discontinuidad son las palabras de moda del hipertexto de hoy en día, y parecen convertirse rápidamente en principios, de la misma manera que la relatividad desplazó no hace mucho a la manzana que cae... El medio impreso es un medio condenado y obsoleto. tecnología, una mera curiosidad de tiempos pasados ​​destinada pronto a ser consignada para siempre a esos museos polvorientos y desatendidos que ahora llamamos bibliotecas”.

Las empresas comerciales entraron en acción y publicaron enciclopedias en CD-ROM (Encarta de Microsoft , luego Enciclopedia Británica ). Voyager Company publicó varios títulos en su plataforma hipermedia de libros ampliados Hypercard. Rocket eBook (1998), e-ink Librie de Sony (2004), iPhone y Kindle (2007), iPad (2010) no lograron iniciar la revolución largamente anunciada.

Dejando a un lado Amazon KDP , miles de otras empresas emergentes, editores, plataformas tecnológicas de autoedición y distribuidores fracasaron entre 201 y 2018. Los capitalistas de riesgo como Kleiner Perkins (iFund) perdieron una pequeña fortuna apostando a la próxima revolución editorial. En 2018, Amazon terminó controlando alrededor de la mitad de todas las ventas impresas y cuatro quintas partes de todas las ventas de contenido digital. Los iBooks de Apple controlan el resto (aprox. 10% del mercado).

La ahora desaparecida BookTailor solía vender su software de personalización de libros principalmente a agentes de viajes. Los suscriptores crearon su propia edición privada a partir de una biblioteca de contenido electrónico. La antología idiosincrásica emergente se imprimió y encuadernó a pedido o se empaquetó como un libro electrónico.

Consideremos lo que este simple modelo de negocio afecta a nociones antiguas y arraigadas como “original” y “copias”, derechos de autor e identificadores de libros. ¿Es el “original” el libro final, personalizado por el usuario, o sus fuentes? ¿Deberían dichas tiradas de una sola copia ser elegibles para identificadores únicos (por ejemplo, ISBN únicos)? ¿Posee el usuario algún derecho sobre el producto final elaborado por él? ¿Se siguen aplicando los derechos de autor de los autores originales?

Los miembros de la comunidad BookCrossing.com registran sus libros en una base de datos central, obtienen un BCID (Número de identificación de BookCrossing) y luego le dan el libro a alguien, o simplemente lo dejan tirado para que lo encuentren. Los sucesivos propietarios del volumen proporcionan a BookCrossing sus coordenadas. Este modelo inocuo subvierte el concepto legal de propiedad y transforma el libro de un objeto pasivo e inerte a un catalizador de interacciones humanas. En otras palabras, devuelve el libro a sus orígenes: una cápsula del tiempo que invita al diálogo.

Sus defensores protestan diciendo que los libros electrónicos no son simplemente una interpretación efímera de sus predecesores impresos: son un nuevo medio, una experiencia de lectura completamente diferente. Se suponía que cada elemento del libro electrónico, desde la trama hasta los garabatos, era animado, responsivo, interactivo y basado en elecciones.

Los libros electrónicos se programarán para reaccionar al estado de ánimo del lector, su ubicación (realidad aumentada) e incorporar información en tiempo real (cumpleaños, nombres de restaurantes y museos que visitó el lector). Las comunidades de lectores resaltarán, compartirán y comentarán y sus aportes se convertirán en una parte integral del libro electrónico, se pensó.

Se promocionaron estas opciones: hipervínculos dentro del libro electrónico a contenido web y herramientas de referencia; compras y pedidos instantáneos integrados; tramas divergentes, interactivas para el usuario y basadas en decisiones; interacción con otros libros electrónicos mediante Bluetooth o algún otro estándar inalámbrico; autoría colaborativa, juegos y actividades comunitarias; contenido actualizado automática o periódicamente; capacidades multimedia; bases de datos de marcadores, registros de hábitos de lectura, hábitos de compra, interacción con otros lectores y decisiones relacionadas con la trama; capacidades de traducción y conversión de audio automáticas e integradas; capacidades completas de picoredes inalámbricas y redes de dispersión; y más.

En un ensayo titulado “El libro procesado”, Joseph Esposito expone cinco capacidades importantes de los libros electrónicos: como portales o interfaces hacia otras fuentes de información, como textos autorreferenciados, como plataformas “tocadas” por otros recursos, como entradas procesadas por máquinas y libros electrónicos que sirven como nodos en redes.

Los libros electrónicos, contrariamente a sus oponentes, han cambiado poco más allá del formato y el medio. Los audiolibros son más revolucionarios que los libros electrónicos porque ya no utilizan símbolos visuales. Considere los protocolos de desplazamiento: lateral y vertical. El papiro, el periódico de gran formato y la pantalla de la computadora son tres ejemplos del tipo vertical. El libro electrónico, el microfilme, la vitela y el libro impreso son ejemplos del rollo lateral. Nada nuevo aquí.

Los libros electrónicos son un retroceso a los días del papiro. El texto se coloca a un lado de una serie de “hojas” conectadas. El pergamino, en comparación, tenía varias páginas, era fácil de navegar y estaba impreso en ambos lados de la hoja. Condujo a una revolución en la edición y, en última instancia, en el libro impreso. Todos estos avances ahora están siendo revertidos por el libro electrónico, lamentan los antagonistas.

La verdad, como siempre, se encuentra a medio camino entre la burla y la adulación.

El libro electrónico conserva una innovación del pergamino: el hipertexto. Los primeros textos judíos y cristianos, así como los estudios jurídicos romanos, fueron inscritos o, más tarde, impresos, con numerosos enlaces intertextuales. El Talmud, por ejemplo, comprende un texto principal (la Mishná) rodeado de referencias a interpretaciones académicas (exégesis).

Ya sea en papiro, pergamino, papel o PDA, todos los libros son portátiles. El libro es como un perpetuum mobile. Difunde su contenido de forma viral, haciéndose circular, y no es disminuido ni alterado en el proceso. Aunque físicamente erosionado, se puede copiar fielmente. Es permanente y, sujeto a fiel replicación, inmutable.

Es cierto que los textos electrónicos dependen del dispositivo (lectores de libros electrónicos o unidades de ordenador). Son específicos del formato. Los cambios en la tecnología (tanto en hardware como en software) hacen que muchos libros electrónicos sean ilegibles. Y la portabilidad se ve obstaculizada por la duración de la batería, las condiciones de iluminación o la disponibilidad de infraestructura adecuada (por ejemplo, de electricidad).

La tecnología de la imprenta acabó con el monopolio de contenidos. En cincuenta años (1450-1500), el número de libros en Europa aumentó de unos pocos miles a más de nueve millones. Y, como señaló McLuhan, cambió el énfasis del modo oral de distribución de contenido (es decir, “comunicación”) al modo visual.

Los libros electrónicos son sólo la última aplicación de principios antiguos a nuevos "contenedores de contenido". Cada una de estas transmutaciones produce un aumento en la creación y difusión de contenidos. Los incunables –los primeros libros impresos– hicieron accesible el conocimiento (a veces en lengua vernácula) tanto a eruditos como a profanos y liberaron a los libros de la tiranía de los scriptoria y las “bibliotecas” monásticas.

Los libros electrónicos prometen hacer lo mismo.

En el futuro previsible, los “cajeros automáticos de libros” ubicados en rincones remotos de la Tierra podrán imprimir bajo demanda (POD) cualquier libro seleccionado de listas editoriales anteriores y anteriores que comprendan millones de títulos. Las editoriales personalizadas y la autoedición permiten a los autores superar las barreras editoriales de entrada y publicar su trabajo a un precio asequible.

Internet es el canal ideal de distribución de libros electrónicos. Amenaza el monopolio de las grandes editoriales. Irónicamente, los primeros editores se rebelaron contra el monopolio del conocimiento de la Iglesia. La industria floreció en sociedades no teocráticas como los Países Bajos e Inglaterra, y languideció donde reinaba la religión (el mundo islámico y la Europa medieval).

Con los libros electrónicos, el contenido vuelve a ser un esfuerzo colaborativo, como lo fue hasta bien entrada la Edad Media. El conocimiento, la información y las narrativas alguna vez se generaron a través de las interacciones entre los autores y la audiencia (recuerde a Sócrates). Los libros electrónicos interactivos, los multimedia, las listas de discusión y los esfuerzos de autoría colectiva restauran esta gran tradición.

Los autores vuelven a ser los editores y comercializadores de su trabajo, como lo fueron hasta bien entrado el siglo XIX, cuando muchos libros debutaron como folletos serializados en periódicos o revistas o se vendieron mediante suscripción. Los libros electrónicos serializados se remontan a estas tradiciones interválicas. Los libros electrónicos también pueden ayudar a restablecer el equilibrio entre los más vendidos y los autores intermedios y entre la ficción y la no ficción. Los libros electrónicos son los más adecuados para atender a nichos de mercado desatendidos.

Los libros electrónicos, más baratos incluso que los de bolsillo, son la “literatura para millones” por excelencia. Tanto las antiguas bibliotecas de reimpresiones como los actuales editores de libros electrónicos se especializan en libros baratos de dominio público (es decir, cuyos derechos de autor han expirado). John Bell (compitiendo con el Dr. Johnson) publicó “Los poetas de Gran Bretaña” en 1777-83. Cada uno de los 109 volúmenes costó seis chelines (en comparación con la guinea habitual o más). La Biblioteca Ferroviaria de novelas (1.300 volúmenes) cuesta 1 chelín cada una sólo ocho décadas después. El precio siguió cayendo a lo largo del siguiente siglo y medio. Los libros electrónicos y POD retoman esta tendencia.

La caída de los precios de los libros, la reducción de las barreras de entrada ayudadas por las nuevas tecnologías y el crédito abundante, la proliferación de editoriales y la competencia despiadada entre los libreros fue tal que hubo que introducir una regulación de precios (cártel). Los precios netos de las editoriales, los descuentos comerciales y los precios de lista son prácticas anticompetitivas de la Europa del siglo XIX. Aún así, este lamentable período también dio origen a asociaciones comerciales, organizaciones editoriales, agentes literarios, contratos de autor, acuerdos de regalías, marketing masivo y derechos de autor estandarizados.

A menudo se percibe que Internet no es más que un catálogo glorificado (aunque digitalizado) de pedidos por correo. Pero los libros electrónicos son diferentes. Los legisladores y los tribunales aún tienen que establecer si los libros electrónicos son libros. Los contratos existentes entre autores y editores pueden no cubrir la interpretación electrónica de textos. Los libros electrónicos también ofrecen una seria competencia de precios a las formas más tradicionales de publicación y, por lo tanto, es probable que provoquen una realineación de toda la industria.

Es posible que sea necesario reasignar derechos, redistribuir ingresos y reconsiderar las relaciones contractuales. Hasta ahora, los libros electrónicos equivalían a poco más que versiones reformateadas de las ediciones impresas. Pero los autores publican cada vez más sus libros principal o exclusivamente como libros electrónicos, socavando así tanto los libros de tapa dura como los de bolsillo.

Los impresores y editores luditas resistieron –a menudo violentamente– a cada fase de la evolución del oficio: los estereotipos, la prensa de hierro, la aplicación de la fuerza del vapor, la encasillación y composición tipográfica mecánica, los nuevos métodos de reproducción de ilustraciones, las encuadernaciones en tela, el papel hecho a máquina, Libros encuadernados, libros de bolsillo, clubes de lectura y fichas de libros.

Sin excepción, finalmente cedieron y adoptaron las nuevas tecnologías con considerable ventaja comercial. De manera similar, los editores se mostraron inicialmente vacilantes y reacios a adoptar Internet, POD y la publicación electrónica. No es de extrañar que se dieran cuenta.

Los libros impresos de los siglos XVII y XVIII fueron ridiculizados por sus contemporáneos por ser inferiores a sus antecedentes laboriosamente hechos a mano y a los incunables. Estas quejas recuerdan las críticas actuales a los nuevos medios (Internet, libros electrónicos): mala calidad de fabricación, apariencia lamentable y piratería desenfrenada.

Las primeras décadas que siguieron a la invención de la imprenta fueron, como dice la Enciclopedia Británica, “un periodo inquieto y altamente competitivo libre para todos... (con) enorme vitalidad y variedad (que a menudo conduce a) un trabajo descuidado”. Hubo actos atroces de piratería, por ejemplo, la copia ilícita de los “libros de bolsillo” latinos de Aldo Manuzio, o el omnipresente contrabando de libros en Inglaterra en el siglo XVII, resultado directo de la sobrerregulación y los monopolios coercitivos de derechos de autor.

La obra de Shakespeare fue replicada repetidamente por infractores de derechos de propiedad intelectual emergentes. Más tarde, las colonias americanas se convirtieron en el centro mundial de la piratería de libros industrializada y sistemática. Enfrentados a libros extranjeros pirateados, abundantes y baratos, los autores locales recurrieron al trabajo independiente en revistas y a giras de conferencias en un vano esfuerzo por llegar a fin de mes.

Los piratas y los editores sin licencia (y, por lo tanto, subversivos) fueron procesados ​​bajo una variedad de leyes de monopolio y difamación y, más tarde, bajo leyes de seguridad nacional y obscenidad. Tanto los gobiernos reales como los “democráticos” actuaron despiadadamente para preservar su control sobre las publicaciones.

John Milton escribió su apasionado alegato contra la censura, Areopagitica, en respuesta a la ordenanza de concesión de licencias de 1643 aprobada por el Parlamento británico. La revolucionaria Ley de Derechos de Autor de 1709 en Inglaterra decretó que los autores y editores tienen derecho a cosechar exclusivamente los beneficios comerciales de sus esfuerzos, aunque sólo durante un período de tiempo prescrito.

La batalla incesante entre los editores industriales y comerciales con su arsenal tecnológico y legal cada vez más potente y la multitud de artes y artesanías de espíritu libre se libra ahora más ferozmente que nunca en numerosas listas de discusión, foros, tomos y conferencias.

William Morris inició el movimiento de la “prensa privada” en Inglaterra en el siglo XIX para contrarrestar lo que consideraba la cruel comercialización de la edición de libros. Cuando se inventó la imprenta, los empresarios privados (comerciantes) de la época la utilizaron comercialmente. Los “editores” establecidos (monasterios), con algunas excepciones (por ejemplo, en Augsburgo, Alemania y en Subiaco, Italia), lo rechazaron como una amenaza importante para la cultura y la civilización. Sus ataques a la imprenta se leen como las letanías actuales contra la autoedición o las publicaciones controladas por corporaciones.

Pero, a medida que el número de lectores aumentó (las mujeres y los pobres se volvieron cada vez más alfabetizados), el número de editores se multiplicó. A principios del siglo XIX, los innovadores procesos litográficos y offset permitieron a los editores occidentales agregar ilustraciones (al principio, en blanco y negro y luego en color), tablas, mapas detallados, diagramas anatómicos y otros gráficos a sus libros.

Editores y bibliotecarios se peleaban por los formatos (tamaños de los libros) y las fuentes (góticas versus romanas), pero prevalecían las preferencias de los consumidores. Nació el libro multimedia. Los libros electrónicos probablemente experimentarán una transición similar desde versiones digitales estáticas de una edición impresa a objetos vivos, coloridos, interactivos y comerciales.

La biblioteca de préstamo comercial y, más tarde, la biblioteca gratuita fueron dos reacciones adicionales a la creciente demanda. Ya en el siglo XVIII, editores y libreros expresaron el temor (infundado) de que las bibliotecas canibalizaran su comercio. Sin embargo, las bibliotecas han mejorado las ventas de libros y se han convertido en un mercado importante por derecho propio. Es probable que hagan lo mismo con los libros electrónicos.

La edición siempre ha sido una actividad social, muy dependiente de los avances sociales, como la expansión de la alfabetización y la liberación de las minorías (especialmente de las mujeres). A medida que cada nuevo formato madura, está sujeto a regulación interna y externa. Los libros electrónicos y otros contenidos digitales no son una excepción. De ahí los intentos recurrentes y actuales de regulación restrictiva y las escaramuzas legales que les siguen.

En sus inicios, cada nueva variante de empaquetado de contenidos se consideraba "peligrosa". La Iglesia, anteriormente la mayor editorial de biblias y otros textos religiosos y “terrenales” y defensora y protectora de la lectura en la Edad Media, castigó y censuró la impresión de libros “heréticos”, especialmente las biblias vernáculas de la Reforma.

Incluso restauró la Inquisición con el propósito específico de controlar la publicación de libros. En 1559 publicó el Index Librorum Prohibitorum (“Índice de libros prohibidos”). Unos pocos editores, principalmente holandeses, terminaron en juego. Los gobernantes europeos emitieron proclamas contra los “libros impresos traviesos” de herejía y sedición.

La impresión de libros estaba sujeta a una licencia del Privy Council de Inglaterra. El concepto mismo de copyright surgió de la inscripción forzada de títulos en el registro de la English Stationer's Company, un instrumento real de influencia e intriga. Ese registro obligatorio otorgaba al editor el derecho a copiar exclusivamente el libro registrado –o, más frecuentemente, una clase de libros– durante varios años, pero restringía políticamente el contenido imprimible, a menudo por la fuerza.

La libertad de prensa y la libertad de expresión son todavía sueños lejanos en la mayor parte del mundo. Incluso en Estados Unidos, la Ley de Copyright del Milenio Digital (DMCA), el V-chip y otras medidas que invaden la privacidad, inhiben la difusión y imponen censura perpetúan una tradición veterana aunque no tan venerable.

Para 2018, la función de financiación, edición, diseño, impresión, distribución, cumplimiento, marketing y creación de comunidades de los editores tradicionales se ha mercantilizado, democratizado, desintermediado y se ha vuelto asequible y accesible para los creadores de contenido individuales (“autores”). Las empresas POD ( Blurb , Amazon , Lulu , Lightning Source e Ingram Spark ) también ofrecen servicios relacionados con marketing y ventas, envío y procesamiento de pagos. Los libros publicados de forma independiente ofrecen tres veces las regalías pagadas por los Cinco Grandes (70% frente a 25%) y constituyen aproximadamente la mitad de todas las ganancias de los autores.

El crowdfunding ahora proporciona una fuente alternativa de capital para los escritores en ciernes. Irónicamente, la mayor parte del dinero recaudado se destina a libros impresos y campañas promocionales de boletines informativos por correo electrónico en Substack, Mailchimp y servicios similares que se lanzaron a partir de 2017. Los boletines informativos cualitativos equivalen a minitomos de prosa tipo libro. Las redes sociales, por otro lado, están perdiendo fuerza debido a la excesiva comercialización.

Los audiolibros y los podcasts también están aumentando y generaron casi 3 mil millones de dólares en 2018. Esto se debe a que la tecnología ha mejorado dramáticamente: mayor duración de la batería, auriculares Bluetooth baratos, sincronización en la nube de múltiples dispositivos. Un estudio de locución casero decente ahora cuesta menos de 800 dólares. Los canales de distribución proliferaron.

Cuanto más cambia, más permanece igual. Si algo nos enseña la historia del libro es que no hay límites al ingenio con el que editores, autores y libreros reinventan viejas prácticas. Las innovaciones tecnológicas y de marketing se perciben invariablemente como amenazas, para luego ser consideradas artículos de fe. La edición enfrenta los mismos problemas y desafíos que enfrentó hace quinientos años y responde a ellos de manera muy similar.

Existencialismo: una filosofía para humanistas seculares

James Haught, Existencialismo: una filosofía para humanistas seculares

Cuando llegué a la mayoría de edad en la década de 1950 y comencé a pensar en la vida, desarrollé una extraña sensación de que el mundo es absurdo, irracional y caótico.

Decenas de millones acababan de morir en la Segunda Guerra Mundial y todos decían lo noble y heroica que fue. Pero la “Gran Guerra” fue sólo la última de innumerables guerras sangrientas que se remontan a antes de que comenzaran los primeros registros escritos. Honduras y El Salvador libraron una guerra en 1969 por un partido de fútbol. Inglaterra se enfrentó a España en el siglo XVIII porque los españoles le cortaron la oreja a un capitán de barco británico. Me pregunté si esto era lo que la gente se hace entre sí: enviar a sus jóvenes patrióticos a matar a otros jóvenes que sienten el mismo patriotismo por el lado opuesto.

También observé a tres cuartas partes de la humanidad orando a espíritus invisibles y esperando ir a cielos mágicos. Los políticos invocaron a los dioses, pero sin evidencia de que nada de eso fuera real. Pensé: es una locura adorar algo que probablemente no existe; sin embargo, miles de millones de personas lo hacen.

Fui testigo de la cruel injusticia de la vida: cómo algunos quedan ciegos o mueren a manos de conductores ebrios o arrastrados por enfermedades debilitantes, mientras que otros no. Es una lotería incomprensible: gira la rueda para ver si tendrás una vida larga y saludable o morirás temprano en agonía.

Nuestras vidas son sólo breves momentos en el enorme lapso de la historia humana. Podríamos haber sido primates prehistóricos, o siervos medievales, o personas de siglos en el futuro, cumpliendo nuestras cortas estadías y luego desaparecidos. A veces me desconcierta darme cuenta de que la gente durante las Cruzadas, la peste bubónica o la Guerra Civil intentaba hacer frente a sus vidas y problemas cotidianos con el mismo fervor que lo hacemos hoy en medio de una pandemia. Luego la muerte los borró.

Cuando una vida termina, la pregunta persiste: ¿realmente tenía algún sentido? ¿Todo esto carecía de sentido? ¿Qué se logró con la molestia de toda la vida de ganar dinero, criar hijos, defenderse de las enfermedades y finalmente sucumbir? Supongo que la respuesta es: la vida de cada persona es intensamente real y vital para él o ella mientras está en progreso; luego termina. Después, ¿realmente importó?

Ésa era mi condición confusa y desconcertada en la década de 1950, cuando el existencialismo irrumpió en la escena global como una ola de nuevo pensamiento.

Decía, sí, la vida es absurda y, en última instancia, inútil. Nos encontramos viviendo vidas, pero no sabemos por qué estamos aquí. Estamos condenados a morir sin saber nunca por qué fuimos “arrojados al mundo”. Lo único que tenemos es nuestra propia vida individual, que es temporal. Existimos, punto, que proporciona el nombre: existencialismo. Estamos “condenados a ser libres”, a vivir dentro de nuestras propias mentes y cráneos, separados de los demás.

Y, sin embargo, no importa cuánto caos y crueldad nos rodeen, cada uno de nosotros no tiene más opción que formular valores y decidir cómo nos comportaremos personalmente. Debemos crear una vida “auténtica” para nosotros mismos, independientemente de lo que haga la sociedad que nos rodea.

Una vez vi la obra absurda “Esperando a Godot”, en la que nada tiene realmente sentido, nada se entiende del todo, todo es confuso e incierto (con un lenguaje político que suena patriótico que en realidad es un galimatías). Pensé que la obra era un brillante reflejo de la realidad cotidiana. Cuando yo era niño, en la década de 1930, había una tira cómica de Gene Ahern en la que un hombrecito barbudo siempre decía "Nov shmoz ka pop". Finalmente, me aferré a ello como una maravillosa expresión de falta de sentido.

De alguna manera, el existencialismo parece una filosofía perfecta para los humanistas seculares, para los inconformistas que no pueden abrazar los cánticos de dioses mayoritarios, los golpes de pecho con fiebre de guerra y las injusticias arraigadas de la sociedad que los rodea. Es para pensadores inadaptados que ven el mundo como medio loco, por lo que cada uno busca un camino privado y personal, fuera de la corriente principal, tratando de ser honesto y dedicado a valores que sólo a ellos les parecen correctos.

Este artículo es una adaptación y actualización de una columna de la edición de abril-mayo de 2013 de Free Inquiry.

martes, 29 de agosto de 2023

Empleos y enchufes

De Quora:

LA TRISTE REALIDAD


Un muchacho termina el Bachillerato y no tiene ganas de estudiar nada. El padre indignado le dice:

—¿Ah? ¿No quieres estudiar? Bueno, yo no mantengo vagos, así que vas a trabajar. ¿Estamos?

El padre, que es un hombre con mucho dinero y metido en la política y tiene algunos amigos políticos, dada su larga trayectoria, trata de conseguirle un empleo y habla con uno de sus compañeros del partido que están en el gobierno.

—López ¿te acuerdas de mi hijo? Bueno, fíjate que terminó el bachillerato y no quiere estudiar.

Si puedes, necesitaría un puesto como para que empiece a trabajar ya, mientras decide si va a seguir una carrera... El asunto es que haga algo y no esté vagando ni se la pase en casa haciendo nada, y así ver si se compone y hace algo de provecho. ¿Me explico?

A los tres días llama López:

–José, ya está. Asesor del Secretario de Energía. Unos US $ 40,000 al mes ¿conforme, verdad?

—¡No, no, López! ¡Es una locura!, recién empieza. Tiene que comenzar de abajo y con esa cantidad de dinero se va a poner peor.

A los dos días, llama de nuevo López:

—José, ya lo tengo. Le conseguí un cargo de asistente personal de un diputado. El sueldo es más modesto, de US $ 25,000 al mes.

—¡No, López!, ¡Acaba de salir del bachillerato! No quiero que la vida se le haga tan fácil de entrada. Quiero que sienta la necesidad de estudiar. ¿Me entiendes?

Al otro día:

—José, ahora sí... Director de compras de la Secretaría de Comunicaciones, ya está; claro que el sueldo se va muy abajo... Serán US $ 15,000 nada más.

—Pero, López, ¡por favor! Consíguele algo más modesto. Está empezando, algo de unos US $ 5,000 a US $8,000 al mes...

—¡Ah, no! ¡Eso es imposible, José!

—Pero ¿por qué?

—Tendría que ser un cargo de maestro, médico, psicólogo, ingeniero..., y esos cargos son por convocatoria; necesita: currículum, título universitario, certificación cada cuatro años, haber hecho méritos, ganar el examen de la convocatoria, competencias docentes, carta de desempeño de su director... Está difícil José, está difícil. Trabajos así no se encuentran fácilmente.

Cómo evitar la procastrinación

De Leonardo Cardillo, en Quora:

Procrastinar: La ardua tarea de posponer lo importante

1. ¿Qué es procrastinar?

Procrastinar es postergar una actividad que percibamos como incómoda, difícil o frustrante. No se trata solo de pereza, sino de la dificultad de enfrentar los requisitos emocionales que esa tarea demanda.

2. Origen histórico del término

El verbo procrastinar no era muy utilizado hasta principios del siglo XXI, cuando se hizo relevante debido al efecto distractor de las redes sociales. Proviene del latín "procrastinare", que significa dejar las cosas para mañana, en contraposición al dicho popular "no dejes para mañana lo que puedes hacer hoy".

3. La procrastinación como un asunto emocional

Contrario a lo que suele creerse, la procrastinación es un problema emocional. Es un comportamiento distractor que nos impide enfrentar actividades que percibimos como dolorosas, incómodas, angustiantes, inquietantes, difíciles o frustrantes. Postergamos estas tareas en busca de un futuro idealizado donde todo sea más fácil.

4. Ejemplos de procrastinación

La procrastinación puede manifestarse de diversas formas, como:

- Preparativos interminables para enfrentar una tarea, como tomar una taza de café, ajustar la silla, cambiar de lápiz, hacer mantenimiento al ordenador, ir al baño, y así sucesivamente.

- Dedicarse a tareas menores e poco importantes para evitar enfrentar la tarea principal y relevante.

- Distraerse con múltiples distracciones al comenzar la tarea importante, como abrir pestañas en redes sociales o iniciar conversaciones por chat.

5. Cómo dejar de procrastinar

Si bien no hay una solución única o sencilla para dejar de procrastinar, algunos cambios de actitud pueden ser útiles, como:

- Dividir la tarea en tareas más pequeñas y manejables.

- Hacer un borrador o versión previa imperfecta de la tarea para disminuir las presiones de perfeccionismo.

- Aceptar nuestras decisiones, deseos y necesidades para restar presión externa y miedo al qué dirán.

- Crear un entorno de trabajo libre de distracciones, como desactivar el teléfono, cerrar sesiones en redes sociales, etc.

- Disminuir las excusas y no culpabilizarnos en caso de evadir la tarea importante.

- Aplicar técnicas de trabajo interrumpido, como el método pomodoro, que divide el trabajo en pequeños lapsos con pausas intermitentes.

En conclusión, procrastinar implica postergar tareas importantes por dificultades emocionales. Para dejar de procrastinar, es importante hacer cambios de actitud y dividir la tarea en pequeñas partes manejables. Así, lograremos ser más eficientes y evitar la frustración de dejar las cosas para después. ¡No dejes para mañana lo que puedas hacer hoy!

domingo, 27 de agosto de 2023

Apólogo hindú del elefante

Apólogo hindú del elefante

Cuando Edward Witten consiguió unificar y simplificar las cinco teorías físicas sobre los superfilamentos (mejor que supercuerdas, como se suele decir) que definen la materia última en once dimensiones, plegadas las más de ellas constituyendo el universo íntimo de las particulas elementales y la mecánica cuántica, en una sola explicación, la teoría del Todo o teoría M, pensé en el famoso apólogo hindú del elefante (por cierto, el dios hindú de la sabiduría en el hinduismo, Ganesha, venerado también por los budistas, se representa con una cabeza de elefante, en un cuerpo humano con cuatro brazos). Y lo hice porque trata de describir nuestra ignorancia de un modo muy socrático, revelando que es incluso mayor que la de un político, sectario por definición, que ya es decir. La teoría M es la teoría que domina después de la corrección que le impusieron los trabajos suscitados esta vez en la física grande y la cosmología, del macrouniverso holográfico (discontinuo y formado simplemente por fragmentos y grumos de información) concebido por las ecuaciones de Juan Martín Maldacena, el físico argentino más prestigioso y respetado de la historia:

Cuatro ciegos palparon el cuerpo de un elefante. Uno le toco la pierna y exclamó:

-El elefante es como un pilar.

El segundo tocó su trompa y dijo:

-El elefante es como una serpiente. El tercero le palpo la barriga y afirmo:

-El elefante es un tonel.

Y el cuarto le tocó las orejas y aseguró:

-El elefante es como un abanico.

Comenzaron a disputar los cuatro, entre ellos, sobre la figura del animal, sobre su aspecto. Y casi llegaron a las manos.

Un transeúnte, viéndoles reñir, les preguntó qué ocurría, y ellos le refirieron lo que defendían y le pidieron que fallara en su disputa. El transeúnte pensó un instante.

-Ninguno de vosotros ha visto el elefante. El elefante no es como un pilar: sus piernas son pilares. Ni es como un tonel: su barriga es como un tonel. No es tampoco como un abanico: son sus orejas las que parecen abanicos. Y tampoco es como una serpiente, porque únicamente su trompa tiene semejanza con una serpiente. El elefante es como una combinación de todo eso, pero es también mucho más que eso.

De la misma manera disputan muchos sectarios que han visto un solo aspecto de la verdad. Pero aquel que ha visto toda la verdad en todos sus aspectos, también puede fallar en todas las disputas.


sábado, 26 de agosto de 2023

Lo cierto y lo verdadero

Nazir Haffar

Qué sé que sea cierto y verdadero


Que salí del cuerpo de mi madre

Que el resto de mis días serán azarosos

Que los detentadores del Poder nunca aflojarán la camisa de fuerza a la que nos someten a todos

Que se impide sistemáticamente que aprendamos, compartamos y nos comportemos con ética

Que se llegará a extremos con tal de entorpecer nuestro desarrollo físico, mental y emocional

Que nada ha cambiado, seguimos viviendo en un sistema feudal que se niega obcecadamente a pasar página

Que te ponen desde que naces tres cadenas al cuello: Una religiosa, otra nacionalista y otra política

Que se siembra sistemáticamente la agnotología, la desinformación, las divisiones y los enfrentamientos entre grupos

Que nos obligan a vivir en un mundo virtual y semántico

Que a pesar de haberse demostrado hasta la náusea que los sistemas que nos rigen y las instituciones que nos controlan son absurdos y esclavizantes, se siguen manteniendo

Que la esclavitud nunca se abolió, solo la rebautizaron con otro nombre

Que las deidades son construcciones semánticas para engañar y acumular Poder

Que todo lo que nos cuentan a diario a todo nivel y a todas horas es falso, son mitos

Que mientras no se libere el conocimiento el mundo será regido por astutos mercaderes y las poblaciones serán manadas de zombies

Que la muerte tocará a tu puerta y que nada de lo que crees tener podrás llevártelo contigo, excepto lo que has experimentado y aprendido

Que la vida es una y no hay más

Que lo más importante en la vida es la ética y la empatía

Y que la única razón de nuestra existencia es aprender y compartir…

miércoles, 23 de agosto de 2023

Dios

Dios, o más bien la brizna de Él que todos tienen sin otra teología que la bondad, es la única parte del humano que merece la pena. Todo lo demás no hace bien alguno, o incluso lo impide. Y olvidar esto es lo que siempre ha causado los horrores que habitualmente se asocian al ser humano. No hay que expulsar a Dios de la cultura, como algunos han hecho en el pasado, con resultados nefastos. Pero eso es lo que se está haciendo ahora; ojalá hayamos aprendido algo del pasado y no lo que dice la famosa canción de Supertramp.

martes, 22 de agosto de 2023

Palabras largas

Por lo general suelen ser moléculas químicas complejas o medicamentos. Una de las palabras más largas en alemán:

Grundstücksverkehrsgenehmigungszuständigkeitsübertragungsverordnung

significa:

Reglamento de Transferencia de Competencias para la Aprobación de Transacciones Inmobiliarias.