Tirar del carro, que dice el rey.
El Rey, a quien no suelo oír porque ya me conozco su canción, ha utilizado una expresión muy curiosa para animarnos a sacar al país de la crisis; ha dicho que todos juntos debemos tirar del carro. Como si uno no supiera que son siempre los burros los que tiran del carro. Los burros, que representan al partido demócrata en EE. UU. Que tire él, si es tan guapo, ya que como no le bastaba la nómina que le pagábamos todos los españoles ha tenido que juntarse encaramado en la cima de la vagoneta del carro con banqueros como Conde y demás miserables, especulando con sus amigos árabes del grupo Kio y demás, mientras otros tiraban, día a día, de su pesado peso y le pagaban los desfalcos, los burros de siempre, aguantando a los que no tiran, sino que pesan y depositan sus boñigas de mierda y sus ingenierías contables y sus engaños y fraudes en la galera. Sí, es cierto, hacen falta burros para tirar de este carro, y hace falta ser muy burros, además.
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