Héroes.

Un profesor, llamado Neira, vio a un marido pegar a su mujer e hizo algo que no se suele hacer: dar ejemplo. Le recriminó su acción y fue a un hotel a llamar a la Guardia Civil. Entonces entró el marido y le dio una paliza, de resultas de la cual Neira ahora está en coma.

La mujer apaleada por esa joya de hombre ni siquiera ha dado las gracias. Muchos incluso pensarán que lo que hizo ese anónimo profesor fue estúpido. Pero ese profesor , casado y con un hijo, ejerció el único principio moral que es posible: dar ejemplo. Como dice Goethe, "si cada cual limpia su camino, la calle estará limpia". Ese hombre es un héroe y señala el camino a los demás: puro imperativo categórico, pura moral kantiana: comportarse de tal modo que su conducta pueda convertirse en norma general. Ese hombre ha convertirdo a nuestro mundo en un poco mejor después de su acción. Quienes no se comportan como él lo degradan, lo transforman en un poco peor cada vez. No se comportaron como él los camareros que lo conocían y que no lo socorrieron. Acaso esa anónima mujer le debe la vida a Neira, pero no ha denunciado a su agresor; la denuncia procede de oficio y ese individuo irá a parar a la cárcel, esta vez acaso por homicidio.