domingo, 17 de febrero de 2008
Drogas
Estoy en contra de las drogas. En contra de las bebidas de más de doce grados. Incluso estoy en contra del tabaco; pienso que a los fumadores habría que encerrarlos en campos de exterminio y llevarlos a hornos crematorios para transformarlos en cenizas y humo; ni siquiera debería dejárseles fumar un cigarrillo de última voluntad antes de morir. Y junto a las demás drogas, habría también que prohibir otras drogas no menos dañinas como la publicidad, el heavy metal, el fútbol, las revistas ilustradas, los mitines y discursos políticos y la televisión basura. Es decir, habría que prohibir la tontería. ¿Es posible?
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