martes, 2 de marzo de 2010

El sentido de los viajes

La golondrina de mar migra anualmente desde el Polo Norte al Polo Sur; puede recorrer más de 70.000 kilómetros durante toda su vida: es capaz de viajar tres veces ( ida y vuelta) a la Luna. Prodigioso; ahora bien, algunos ciudarrealeños morirán en su casa sin haber pisado nunca Miguelturra, aunque hayan estado en China, la India, Sudáfrica, Nueva York y Beluchistán. Un viaje no iniciático, un viaje del que no se aprende nada, del que no se saca nada, ni siquiera un balazo, un libro, una novia, una disentería, unos amigos, un idioma, un hijo o una pierna de menos, no merece la pena; para eso mejor estar en casa viendo postales o viajando por Internet.

No hay comentarios:

Publicar un comentario