domingo, 13 de septiembre de 2015

Ofrenda musical de algunos maravillosos conciertos dados en este año

1. Las dos hermanas Buniatshvili, Katia y Gvantsa, han hecho una obra maestra con el Concierto para dos pianos de Bach  BWV 1062 en la sala Pleyel de París que no me canso de escuchar; las descubrí en el canal Mezzo. Será tonto de capirote aquel que no vea el vídeo: el quid divinum se da muy pocas veces, y esta es una.

2. El segundo tiempo de la Sinfonía del Nuevo Mundo de Dvorak

3. La Pasión según San Juan de Bach toca algo de lo más hondo del corazón humano, trasciende, es una cumbre del arte irrepetible, como la según San Mateo. Son magníficas las versiones de Herreveghe y el Bach Collegium de Suzuki, pero la del gran biógrafo del genio Eliot Gardiner no desmerece. 

4. y 5. El Concierto para piano número 2 de Sergio Rachmaninoff con Anna Fedorova al piano impresiona tan profundamente como los coros celestes de sus Vísperas, op. 37.

6. La sonata 84.ª del padre Antonio Soler es la pura perfección matemática: la arquitectura más luminosa del Siglo de las Luces.

7. El retablo de maese Pedro, adaptación por Manuel de Falla del episodio cervantino en un solo acto, en la mejor versión que he podido encontrar en Internet.

8. El Arabesco I de Debussy.

No hay comentarios:

Publicar un comentario