El siglo XIX, que conozco bastante bien, viene a ser como un borrador del siglo XX; algunas cosas que aparecen oscuras en el siglo XX se ven claras cuando se ve su germen en el XIX. Por ejemplo: España salió de las guerras civiles carlistas con una restauración monárquica y un bipartidismo hipócrita fundado en el caciquismo y la oligocracia que excluía al verdadero partido del pueblo, el Demócrata de Roque Barcia , ninguneado, como lo fue la tercera España, la krausista, la de la reforma moral, la de la Institucion Libre de Enseñanza. Pues bien, a fines del siglo XX salimos de una Guerra Civil y de una dictadura con una Restauración monárquica y un bipartidismo Cánovas-PP/Sagasta-PSOE fundado en el caciquismo de los partidos regionalistas y las autonomías y fundado en la corrupción de la mafia del ladrillo, las grandes familias y el monopolio y manipulación informativos, dejando al partido demócrata, en este caso representado por Verdes, Izquierda Unida y demás rarillos de la política en el más absoluto desamparo informativo. Y todo el mundo sabe cómo terminó el régimen bipartidista establecido por Cánovas, que al menos dio una cierta estabilidad a este país nuestro.
Qué poco cambian las cosas. Y qué futuro más negro nos espera.
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